Un gran trabajo de formación deportiva y desarrollo de talentos se realiza en el Gimnasio El Ranchero de Gómez Palacio, donde los hermanos Sergio y José Andrade, experimentados luchadores profesionales, atienden a niños y jóvenes de la ciudad en lo que se refiere a la instrucción en luchas asociadas y lucha libre profesional.
Para ello se cuenta con el total apoyo de Arturo Martínez "El Ranchero", un deportista de toda la vida, quien aporta el lugar y donde una buena cantidad de elementos reciben capacitación.
Pese a la buena voluntad del propietario de este añejo escenario y los entrenadores encargados, la situación se ha vuelto verdaderamente problemática, al tratarse de un sitio que ha pagado tributo al tiempo, luego de décadas de servicio, con estructuras débiles y en peligro del derrumbe, además de la falta de equipo apropiado para las necesidades del deportista contemporáneo.
Luego de que durante la administración municipal anterior se le otorgara la sede como escuela municipal de luchas asociadas, el trabajo se ha incrementado a favor de la comunidad, pero con un nulo apoyo de las autoridades gomezpalatinas para mejorar sus instalaciones, al quedar sólo en promesas que nunca se han cumplido.
Fue lastimoso ver cómo el pasado fin de semana se desarrollaron en el lugar los selectivos municipales de luchas asociadas y halterofilia, donde al no contar con los colchones especiales para luchas se tuvo que realizar la competencia sobre el ring de lucha libre, con el riesgo de lesiones o caídas para los protagonistas.
De la misma forma se tuvo la competencia de halterofilia, donde se utilizó equipo no apropiado para este tipo de competencias, quedando también de manifiesto la urgencia de equipamiento para este templo del deporte, que a pesar de todo continúa con su labor en la formación de talentos.
La alcaldesa gomezpalatina tiene empeñada su palabra, en el sentido de realizar una total remodelación y equipamiento del lugar y se espera que sea en 2011 cuando se ponga en marcha este programa de modernización a favor de la niñez y juventud de Gómez Palacio, esperándose que no quede en simples promesas y una decepción más para el deporte, como ha ocurrido hasta ahora.
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