Love. La misa funeral en memoria de las víctimas se llevará a cabo el próximo sábado. En la fotografía, familiares lloran a sus muertos.
La nueva primera ministra de Renania del Norte-Westfalia, Hannelore Kraft, aseguró ayer en una rueda de prensa en Düsseldorf (oeste de Alemania) que ninguno de los 20 fallecidos en el Love Parade de Duisburgo murió a consecuencia de una caída, sino que fueron aplastados en la avalancha.
La dirigente del Partido Socialdemócrata ofreció los primeros detalles de la investigación que realiza la policía de Colonia y afirmó que las víctimas mortales fallecieron por contusiones en el tórax. Sobre los crecientes llamamientos al alcalde de Duisburgo, Adolf Sauerland, para que dimita, la jefa del Gobierno regional no descartó que "al final haya responsabilidades políticas".
Igualmente Kraft anunció que el "Land" (estado federal) de Renania del Norte-Westfalia propondrá una nueva legislación para toda Alemania en lo que respecta a grandes concentraciones de personas.
FUNERAL SERÁ EL SÁBADO
Por su parte, la misa funeral ecuménica en memoria de las víctimas del "Loveparade" se celebrará el próximo sábado en la Salvatorkirche de Duisburgo, informó la alcaldía. La misa será celebrada por el obispo de Essen, Franz-Josef Overbeck, y el máximo responsable de la iglesia evangélica en Renania, Nikolaus Shneider.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, y el presidente federal, Christian Wulff, suspenderán momentáneamente sus vacaciones para acudir al funeral.
