Altibajos. El ex presidente argentino Néstor Kirchner abandona el sanatorio de Los Arcos, en Buenos Aires.
BUENOS AIRES, ARGENTINA.- Cuando los problemas arrecian en la cotidiana actividad política de los Kirchner, la pareja en el poder en Argentina, es la salud del ex presidente Néstor Kirchner la que se resiente. Ocurrió en 2004, cuando fue hospitalizado de urgencia en la ciudad de Río Gallegos, y volvió a acontecer ahora, cuando días después de una dura discusión político-matrimonial, el primer esposo del país terminó en un quirófano, con un accidente cerebrovascular leve, que podría llegar a condicionar su futuro político.
Kirchner & Kirchner es una sociedad política casi perfecta, además de un matrimonio. Diversas fuentes consultadas, dieron cuenta que la revelación de una lista en la que el ex mandatario aparece como el comprador de dos millones de dólares, corolario de la crisis desatada en el Banco Central (BC) en enero, derivó "en una fuerte discusión entre la presidenta y su esposo", justo cuando Cristina Kirchner designó a la economista Mercedes Marco del Pont, como nueva presidenta del Central.
Dos días después fue el senador Carlos Reutemann, al que los Kirchner siempre evitan enfrentar por considerarlo uno de los favoritos en las encuestas presidenciales, quien salió a distanciarse de la pareja, con una declaración altisonante: "En 2011, cuando se vayan los Kirchner, con tal de que no se hayan afanado (robado) la Casa Rosada (palacio de Gobierno) y la Plaza de Mayo, vamos a estar todos contentos los argentinos...", palabras que en el seno del matrimonio cayeron como una bomba.
"El estrés, su colon irritable y otros problemas de los últimos tiempos dieron lugar a la descomposición y a la posterior internación" que terminó en una intervención quirúrgica igual y por la misma lesión cardiovascular que la que sufrió el ex presidente Carlos Menem (1989-1999) en el 93.
Todo sucedió el domingo 7 en la tarde, cuando el país estaba más pendiente de los partidos de futbol y de lo que pasaba en la Costa Atlántica en un tórrido verano, que del acontecer político.
TENSIÓN E INCERTIDUMBRE De repente, la falta de información oficial y las versiones cruzadas sobre la gravedad de la enfermedad de Kirchner, a la postre "el presidente en los hechos", hizo que el país se sumiera en un extrema incertidumbre por casi cinco horas.
"Hubo mucha tensión, la presidenta que estaba en el hospital rechazó al sacerdote que fue enviado por el cardenal Jorge Bergoglio para darle la unción de los enfermos, y todos nos tranquilizamos cuando llegamos al lugar y los médicos nos dijeron que todo estaba controlado y que (el ex presidente) en 48 horas estaría fuera del hospital", confió un ministro 'off the record' a un puñado de periodistas.
Una vez fuera del sanatorio, las usinas oficiales comenzaron a difundir que su primera orden a sus colaboradores y ministros fue la de preparar todo "para retomar la conducción del PJ (Partido Justicialista) y para la candidatura de 2011". Pero en las cercanías de la pareja sostienen que nada está decidido, que todo depende de su estado de salud.
"Por si acaso, ya se trabajan algunas alternativas", como por ejemplo una eventual postulación a la reelección de la presidenta Cristina, por la que viene operando desde ya el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
Si bien las encuestas no acompañan a ninguno de los dos, por el alto nivel de rechazos que despiertan sus figuras, para la socióloga Graciela Romer es la presidenta la que tendría más probabilidad de recuperación. "Comenzó ya a moverse para recuperarse en las encuestas y recomponer su vínculo con la sociedad, con chistes, con referencias sexuales que buscan acaparar la atención de los sectores populares. Ahora debería modificar algunas de sus políticas", dijo.
El problema vendrá si Kirchner decide no dar un paso al costado en sus planes para 2011. El diputado Agustín Rossi, jefe del Bloque de Diputados kirchneristas, dijo que "es muy prematuro aún hablar de candidaturas. Cualquiera de los dos han demostrado que están aptos para encabezar el proyecto, habrá que ver en su momento cómo están las cosas", o las encuestas.