Inseguridad. Las vallas colocadas para incrementar la seguridad de los usuarios ya no operan.
La Ciudad Deporiva sigue siendo, pese a los daños que en general tiene, la más utilizada los fines de semana. Sin embargo, algunos de sus espacios quedaron prácticamente infuncionales por la falta de mantemiento.
La práctica del baloncesto, por ejemplo, está en peligro de extinción, pues los tableros y canchas ya no son adecuadas para que los deportistas los utilicen.
En un recorrido realizado por El Siglo de Durango, se pudieron corroborar las malas condiciones: hierba crecida, basura abundante, daños en los corredores vehiculares y destrucción de elementos deportivos.