Han transcurrido cuatro días de competencia en la Copa del Mundo, once partidos, 18 goles anotados, es decir, un promedio de 1.6 por juego. La verdad, hasta el momento sin llegar abiertamente a la decepción, sólo por momentos hemos visto un futbol agradable. De los representantes de Latinoamérica, que hasta el momento se han presentado Argentina, es quien mejor se ha visto, venció a un rival muy duro, los nigerianos, que saben sacar partida de su superioridad física pero los argentinos los superaron en base a talento, el juego no terminó en goleada gracias a la formidable actuación del arquero Vincent Enyeama, Messi no decepcionó y seguramente nos dará otra gran demostración el próximo jueves en Johannesburgo cuando enfrente por el liderato del grupo a los sudcoreanos.
Los uruguayos y los franceses aburrieron mortalmente a los pobres asistentes en Cape Town, se habló mucho de la ofensiva charrúa, pero la verdad es que sólo Forlán justificó en algo su categoría de uno de los mejores delanteros del mundo, Luis Suárez, Álvaro Pereira y el "Loco" Abreu cuando entró no inquietaron a la defensa gala.
Paraguay, fiel a su estilo rocoso y trabado, apostó al excelente cabeceo en ambas áreas de sus defensas y le complicó la vida a unos italianos que en mundiales pasados fingían demencia para luego apretar y materialmente colarse a instancias mayores, ahora francamente por lo demostrado ante Paraguay se notó la desesperación de los azzurri, querían pero no podían; si no mejoran ante Nueva Zelanda el domingo en Nelspruit, los actuales subcampeones podrían quedar marginados y no por falta de ambición, sino simplemente por ineficacia y falta de recursos.
México es otro que pudo ganar con claridad (al igual que los argentinos) sobre todo en el primer tiempo, pero un mal atávico como la ineptitud para culminar las jugadas claras en gol no acaba por abandonar a los nuestros. Tengo mis serias dudas de si se le puede llamar a un futbolista "un gran delantero" si no posee la contundencia, por años le hemos llamado así a muchos delanteros mexicanos, Enrique Borja, López Salgado, Víctor Rangel, Hugo Sánchez, Luis Hernández, Jared Borgetti, etcétera, ninguno en Copas del Mundo hizo el gol que liquida, el que asegura el resultado, siempre se quedaron en la orilla, los antes mencionados sin duda grandes goleadores en sus respectivas ligas pero temerosos delanteros en Copas del Mundo.
Hoy martes aparece Brasil, va contra Corea del Norte, los mismos que visitaron el Corona TSM para caer dos a uno contra el Tri, por cierto, en ese juego inició el desmoronamiento de Memo Ochoa. Pero volviendo a los brasileños, como siempre, la esperanza de un futbol lindo viene con ellos, ojalá ganen y gusten y se pongan a la par de los alemanes, ya que los teutones han sido los más convincentes como candidatos al título, en fin, esto apenas se está calentando y esperemos mejores juegos, su servidor, por su parte, se la jugará nuevamente y madrugará para ver el Nueva Zelanda contra Eslovaquia, quien quita y estos dos protagonizan un partido entretenido.
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