Con desazón se debe haber recibido la noticia de que los gringos han emitido ya una alarma puntual a sus conciudadanos para que extremen precauciones o de plano eviten viajar a La Laguna.
Si bien es cierto estas alertas se habían publicado con anterioridad, y en ellas ya había el claro señalamiento hacia los estados de Coahuila y Durango, junto a Michoacán y Chihuahua y en particular Ciudad Juárez, urbe catalogada ya como una de las más violentas del mundo; ahora la advertencia ha venido con precisión al señalar las ciudades de Gómez Palacio y Torreón.
Esta información viene a perjudicar enormemente a la región entera porque ya la escalada de violencia que se ha vivido últimamente de suyo había arrastrado el ánimo y la incipiente actividad comercial nocturna a reactivarse, a llevarla nuevamente al piso, estropeando y sobre todo dañando, cientos de empleos que la actividad genera.
Los ajustes de cuentas y los asesinatos entre ciertos grupos sociales nunca se han detenido, particularmente en el violento Gómez Palacio, pero parecía que los hechos se habían apartado de suceder entre fragorosas balaceras entre grupos, o con los policías. Sin embargo, volvieron las cosas en su máxima expresión. El atentado a parroquianos de un bar, el enfrentamiento en hora pico frente a Galerías en día feriado, y hasta la balacera suscitada en la madrugada del martes 15 pasado, han llevado de nuevo a la paranoia colectiva a los laguneros en general. En Durango capital, fue acribillado el alcalde del Mezquital, la meritita tierra del gobernador Ismael Hernández, cuando el edil cenaba como mucha otra gente en un céntrico Vips apenas había caído la tarde. El hecho como tantos otros fue simplemente horrendo y cruel. Todos estos sucesos abonan a la decisión lamentable de que se haya generado el aviso de peligro de venir a los americanos, y que ya se incluya a la Comarca en específico.
Es un hecho irrefutable que por las condiciones que sean, en el estado de Coahuila, la capital Saltillo se haya visto mucho más favorecida en la atracción de inversión extranjera que La Laguna de Coahuila, y esto ha propiciado continuar con la tendencia que mientras los saltillenses prosperan a paso sensible, La Laguna cada vez muestra un mayor rezago. El tema de la Administración municipal pasada y su desempeño no es suficiente para justificar tan abierta diferencia en el fomento económico que el Gobierno le ha dado a las dos zonas urbanas, pero allende eso, la alerta viene a ser un dardo que ciertamente degrada las condiciones de atracción a los empresarios internacionales que buscan plazas para establecer sus industrias, que a la postre generan bienestar para las poblaciones que alojan esas fábricas.
Hace unas semanas Humberto Moreira se molestó porque fue cuestionado por su ausencia, justo después de haberse recrudecido la violencia en La Laguna de Coahuila. Hoy el asunto es otro: se requiere que el gobernador Moreira venga y vaya con un mensaje de fuerza que señale que La Laguna está lista para recibir inversión, y que además haga realmente cosas para tratar por lo menos que la población civil no tenga que vivir en primera fila o como actor, las luchas a balazos que se han estado viviendo. En tanto Ismael, por enésima ocasión debe ser conminado a que haga algo al respecto sobre el tema que ha venido a empañar su gestión que está en los últimos meses.
Hace unas semanas se trataba de dos millones de pesos que el alcalde iba (o va) a destinar del erario para arreglar su penthouse en lo que fue el edificio del Banco de México; qué vergüenza. Y ahora sale el peine con un detalle significativo por la impresión de los recibos de Tesorería Municipal y Simas, que se hicieron sin licitación alguna y ni siquiera orden de compra. Además la dirección de la imprenta consignada para su elaboración, tiene el domicilio del despacho privado del tesorero municipal, quien se excusa en que fue un detallito producto de las prisas, y dice ufanamente que lo volvería a hacer diez veces.
Pronto va a aprender el novel funcionario municipal que esos detallitos pueden provocarle responsabilidades ante la ley administrativa o en su caso penales, por lo que seguramente no lo repetirá de esa forma, eso se espera.