La Oficina Nacional del Censo lanzó hoy una campaña desde Times Square, con valor superior a los 340 millones de dólares y catalogada como una de las más amplias, para promover el conteo de todas las personas que viven en territorio estadunidense.
El lanzamiento de la gira, denominada 'Retrato estadounidense para promover el Censo 2010', estuvo a cargo del secretario de Comercio del país, Gary Locke, junto con el director general de la Oficina del Censo, Robert M. Groves, y el alcalde Nueva York, Michael Bloomberg.
'Son 10 preguntas que no tomará más de 10 minutos contestar, y la información no será compartida con ninguna otra agencia del gobierno. Es estrictamente confidencial', manifestó Locke.
Un bus de casi 14 metros de largo y otros 12 vehículos recorrerán diversas ciudades y estados de la nación con el objetivo de promover los beneficios de participar en el censo.
'Nueva York es una de las más diversas del país, y la que mayor población de hispanos tiene. Tenemos problemas de barrera del idioma que serían resueltos en gran parte si recibimos fondos federales para programas educacionales', dijo Bloomberg.
La gira busca educar a la comunidad, que recibirá el cuestionario entre el 15 y el 17 de marzo, para que lo conteste y lo envíe.
'La campaña participará en 800 eventos a nivel nacional y recorrerá cerca de 250 mil kilómetros para promover el censo y la importancia de la participación de todas la personas que viven es Estados Unidos', expresó Raúl Cisneros, jefe de promoción del Censo 2010.
Saúl Linares, jornalero salvadoreño, dijo que el problema de que los inmigrantes indocumentados no quieran participar en el Censo ha sido infundido y generado por el mismo gobierno, que ahora hace campañas para que se dejen contar.
'La gente tiene sus reservas y miedo porque las redadas y las persecuciones a inmigrantes indocumentados son realizadas por el mismo gobierno federal', indicó Linares, quien reside en Long Island.
Por su parte Omar Henriquez, activista comunitario y que ahora hace parte del equipo de Censo, asegura que los inmigrantes podrían obtener beneficios si hay una reforma migratoria.
'Los fondos federales se distribuyen de acuerdo al número de personas contadas, pero es un gran beneficio para los indocumentados que esperan una reforma migratoria, y ésta es una prueba de que residen en Estados Unidos', expresó Henriquez.
El activista resaltó que el censo sólo entrega la información a las personas que fueron censadas.
La campaña está enfocada a todas la comunidades, nativas e inmigrantes, con una campaña publicitaria en 28 idiomas de cómo llenar el cuestionario.
Existen más de 150 mil socios para lograr conectarse con las comunidades a nivel nacional para motivar al público a participar en el Censo.
Cada año el gobierno federal distribuye unos 400 mil millones de dólares para programas de salud, educación y transporte por todo el país, y estos fondos son distribuidos con base en la población de un estado, la localidad o región.
'Son 10 preguntas y no se cuestiona el estatus migratorio ni número de seguro social, sólo queremos saber el nombre, sexo y edad. Tomamos muy en serio la confidencialidad de los datos que recolectamos', puntualizó Cisneros.