Se van. Integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas levantan el plantón y huelga de hambre que por 90 días mantuvieron en la Plaza de la Constitución.
La Secretaría de Gobernación (Segob) y el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) instalarán el próximo lunes una mesa de trabajo de "alto nivel", tras un acuerdo que llevó al levantamiento de la huelga de hambre en el Zócalo capitalino, en medio de declaraciones encontradas sobre los compromisos que se asumieron el viernes pasado y el sigilo por parte de las autoridades federales al respecto.
Martín Esparza, líder del SME, aseguró que la Segob se comprometió a realizar la toma de nota a los 26 integrantes de la dirigencia sindical, reafirmándolo como la cabeza de la organización, lo que permitirá que siga el diálogo con el Gobierno.
El titular de Gobernación, Francisco Blake Mora, aclaró que el único acuerdo fue retomar el diálogo y la conclusión del ayuno que sostuvieron ex trabajadores electricistas, como se informó en un comunicado en la madrugada.
SME EN LA 'NADA JURÍDICA' En este momento el Sindicato Mexicano de Electricistas se encuentra en la "nada jurídica", pues sus recursos están congelados y aún no cuentan con el reconocimiento de su dirigencia al carecer de la toma de nota por parte de la Secretaría del Trabajo.
Así lo informó el titular de la STPS, Javier Lozano, al señalar que en la reunión entre Gobernación y el SME no se acordó en ningún momento que se le entregaría ésta al gremio, sino que se iban a revisar los documentos necesarios para otorgar la misma.
"La Ley me da 60 días para revisar esto con todo cuidado y poder cotejar que los documentos que se presentan sean compatibles con los estatutos del propio sindicato y con la Ley Federal del Trabajo".
Alejandro Muñoz, de la disidencia del SME, dijo que tras reunirse con Roberto Gil, subsecretario de Gobernación, éste le comentó que se ofreció la toma de nota a Esparza a cambio de que los trabajadores electricistas levantaran el ayuno.
"Él (Gil) me mandó a llamar y me dijo: hay que entender las cosas cómo están pasando en el país. A final de cuentas, Martín no cedía y tenía que decirse; Martín, a lo que venía, era por la toma de nota a cambio de la huelga".
"Se negocea (sic) la toma de nota por la vida de unos compañeros. Es cierto, la vida de los compañeros vale mucho, habría que ver qué procedimiento se toma y de ahí se sale a la mesa de diálogo... ¿Dónde están los que se estaban muriendo? Si el que estaba más grave (Cayetano Cabrera) salió caminando por la puerta de atrás".
Muñoz afirmó que habrá complicaciones legales en la toma de nota. "No es tan sencillo darla y quien hizo el compromiso tendrá que ver, porque es cierto, no se puede violar la Ley, esa es una realidad". Recordó que la elección en la que ambos participaron quedó invalidada debido a las irregularidades.
Afirmó que Esparza negoció en Gobernación el levantamiento de la huelga a cambio de que se les otorgara la toma de nota. Y eso, insistió, está fuera de la Ley, pues coincidió con el titular del Trabajo en que se debe revisar la documentación que entregaron y, ahí, obviamente se concluirá que no se cumplió con lo que establecen los estatutos ni la Ley.
Segob guardó silencio sobre si efectivamente el acuerdo fue conceder la toma de nota, con lo cual Esparza accedería a los bienes del SME y a la representación legal, a cambio de que se suspendiera la protesta y se hospitalizara a los ayunantes.
Esparza dijo a los miembros del sindicato que estaba en proceso de aprobarse la creación de una empresa paralela con el fin de prestar servicios, pero Lozano lo negó categóricamente, igual que la posibilidad que haya un patrón sustituto o una recontratación colectiva.
Funcionarios cercanos a la negociación, rechazaron que Gobernación prometiera la reinstalación de los trabajadores en sus fuentes laborales por medio de un patrón sustituto o la creación de una nueva empresa. "No se les ofreció nada más".
