Migración. En Durango, las autoridades deben preocuparse por generar empleos para quienes no los tienen y para quienes van a ser repatriados. JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ / EL SIGLO DE DURANGO
Como "brutal" calificó el diputado priista Fernando Ulises Adame de León la afectación para el estado por la entrada en vigor de la Ley Arizona.
Recordó que la entidad cuenta con una migración que rebasa los 40 mil duranguenses por año, "esos emigrantes nos van a rebotar, primero en Arizona y después en otros estados de la Unión Americana y finalmente no sabremos qué hacer con un problema de este tamaño", advirtió.
Urgió a la necesidad de que los estados empiecen a resolver sus propios problemas y se dijo confiado de que en Durango el próximo gobierno genere fuentes de empleo para quienes no lo tienen y para poder sostener a los que van a ser repatriados. De no ser así, "se afectará seriamente no sólo la económía sino también la estabilidad social", advirtió. Dijo que el próximo gobierno estatal "se habrá de caracterizar por retener en Durango a los repatriados o a los que no puedan salir ya de aquí".
Y aunque Arizona no sea de los de mayor captación de duranguenses, dijo que este asunto debe preocupar y ocupar a las autoridades estatales por todas sus implicaciones.
PUEBLO RACISTA
El legislador local dijo que el estadounidense es un pueblo racista distinto al mexicano que, no obstante, resuelve sus problemas. "El Gobierno de la República en México no ha tenido la capacidad de resolverlos, entonces tendremos que ser los estados los que los resolvamos", agregó.
La Ley antiinmigrante SB 1070 entra hoy en vigor en el estado de Arizona, Estados Unidos, aunque con la suspensión de algunas de sus disposiciones más polémicas.