El presidente Felipe Calderón afirmó que todo está listo para iniciar este año la construcción de la Refinería Bicentenario, para lo cual el gobierno federal presupuestó 'y tiene listos cinco mil millones de pesos para arrancar el proyecto'.
El mandatario señaló que, en particular, se quiere invertir 'mucho más dinero y tiempo en la planeación y evaluación del proyecto, precisamente para no repetir errores que se han cometido en el pasado.
'Proyectos enormes que a la hora de ejecutarlos resulta que necesitan más dinero de lo previsto, tecnología distinta a la planeada y no pueden ser sacados adelante por quien se compromete', expuso.
'Hoy la instrucción es clara: la planeación de la (Refinería) Bicentenario debe ser de tal manera cuidadosa, de tal manera evaluada, que nos permita evitar los errores de planeación, de estimación de costos y ejecución en tiempo en que se ha incurrido en el pasado y que han sido caros, muy muy caros para Pemex, y muy muy caros para todos los mexicanos', indicó.
En la ceremonia conmemorativa del 72 Aniversario de la Expropiación Petrolera, informó que han finalizado los trabajos de diseño y revisión integral del esquema de todo el proceso y se han diseñado escenarios críticos de operación en cumplimiento de la normatividad en materia ambiental y de seguridad industrial.
Acompañado por la secretaria de Energía, Georgina Kessel; del director general de Pemex, Juan José Suárez Coppel, y del líder del Sindicato Petrolero, Carlos Romero Deschamps, entre otros, subrayó
que Pemex seguirá siendo clave para transformar a México en el siglo
XXI y por eso es y seguirá siendo empresa de todos los mexicanos.
Calderón subrayó que su gobierno trabaja para modernizar a Petróleos Mexicanos (Pemex) en consonancia con los objetivos de la reforma energética de 2008, con el fin de que produzca más y beneficie a los mexicanos, 'que son los verdaderos dueños de esta gran empresa'.
Destacó que se avanza para que la paraestatal vuelva a ser una de las mejores empresas petroleras del mundo; "vamos en camino y lo vamos a lograr', y dijo que el reto es hacerlo por su eficiencia, reservas, capacidad de producción y compromiso con el medio ambiente.
El mandatario hizo énfasis en que hoy es tiempo de hacerlo con altura de miras, para que Pemex pueda financiar el desarrollo de nuevas generaciones de mexicanos.
Felipe Calderón escuchó porras de trabajadores petroleros cuando daba su mensaje e hizo una pausa porque se escuchó el desfogue normal de vapor de la termoeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad, que no es programado, ubicada en esta zona.
Respecto a la refinería celebró que ya se tengan los terrenos 'sin las disputas legales y controversias jurídicas que acompañan, entorpecen y en ocasiones frustran los grandes proyectos de infraestructura'.
Recordó que ha habido otros proyectos de gran dimensión que México necesita, que se han planeado y anunciado, pero que no fue posible desarrollarlos porque no se contaba con los terrenos para ello.
Estimó que con ese proyecto aumentará la capacidad de refinación, mejorará la oferta de destilados en el país y se alcanzará una capacidad de refinación de un cuarto de millón de barriles diarios.
Al mismo tiempo, añadió, 'podrá procesar los residuales, entre ellos el combustóleo, que ya se produce aquí en Tula, para convertirlos en gasolinas de alta calidad, para aumentar el valor agregado de toda la cadena productiva de Pemex'.
El mandatario además mencionó que el gobierno federal plantea soluciones de fondo a los desafíos de una industria seriamente deteriorada, como la petroquímica nacional, donde se prevé el proyecto Etileno 21, el primero de 'gran calado' en varias décadas.
Anunció que ese proyecto se empezará a construir este año también en Coatzacoalcos, Veracruz, con dos mil 500 millones de dólares provenientes de un grupo mexicano y una empresa brasileña, que representa más de 60 por ciento de toda la inversión que se hizo en petroquímica en todo el sexenio pasado.
Expuso que Etileno 21 producirá un millón de toneladas de etileno al año, lo que representa una oportunidad para desde varios frentes recuperar, fortalecer y elevar la productividad en petroquímica, además de que generará por lo menos ocho mil empleos durante su construcción y tres mil permanentes para su operación.
El titular del Ejecutivo indicó que el gobierno federal impulsa el desarrollo de esa zona de Hidalgo (donde se encuentran los municipios de Tula y Atitalaquia) de manera conjunta con otras obras de infraestructura, como el Arco Norte de la Ciudad de México, que ya está al servicio de los hidalguenses.
También se construye la planta de tratamiento de aguas negras de Atotonilco -que será la más grande de América Latina- que limpiará por primera vez las aguas residuales de la ciudad de México lo que, dijo, debió haberse hecho hace años y décadas.
El presidente de la República dejó claro que el Arco Norte, la Refinería Bicentenario y la planta de tratamiento de aguas son tres pruebas palpables, concretas del compromiso del gobierno federal con Hidalgo y sus ciudadanos.
