Los cuatro uniformados secuestrados por las FARC que fueron liberados por el Ejército colombiano la víspera llegaron hoy a Bogotá con 'las cadenas del terrorismo y el sueño de la libertad', dijo el ministro de Defensa, Gabriel Silva. (AP)
Los cuatro uniformados secuestrados por las FARC que fueron liberados por el Ejército colombiano la víspera llegaron hoy a Bogotá con 'las cadenas del terrorismo y el sueño de la libertad', dijo el ministro de Defensa, Gabriel Silva.
Tras recibirlos en la base militar de Catam, el funcionario dijo a periodistas que los tres oficiales de la Policía Nacional y el suboficial del Ejército son 'héroes de la patria' porque permanecieron muchos años en cautiverio en condiciones muy difíciles.
El brigadier general Luis Mendieta, el oficial de más alto rango que estaba en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue el primero en bajar de la aeronave militar que los trajo a Bogotá desde el selvático y suroriental departamento de Guaviare.
El alto oficial llegó con un impecable uniforme camuflado, mientras que sus tres compañeros llegaron con gruesas cadenas al cuello, que fue imposible quitarles en las selvas por los hombres de las fuerzas especiales que los rescataron de la guerrilla.
Mendieta y los coroneles Enrique Murillo y William Donato, además del mayor Norbey Delgado, quienes llevaban 12 años en poder de las FARC, agradecieron al presidente Alvaro Uribe Vélez y a los altos mandos militares y policiales por su rescate.
Los ex rehenes fueron recibidos con abrazos por el ministro de Defensa, por sus esposas, hijos y hermanos y por la cúpula policial y militar, todos los cuales estaban desde temprano en Catam, en la zona occidente de Bogotá.
El ministro de Defensa no ocultó la alegría de tener a los cuatro hombres en libertad y con un fuerte grito de 'Viva el Ejército, héroes de la patria', presentó a los liberados ante los medios de comunicación en la pista de la base militar.
'Saludo al presidente Uribe y a todos los mandos por este excelente operativo', dijo Mendieta, rodeado de sus más cercanos familiares, oficiales y suboficiales del Ejército y la Policía Nacional.
El general también agradeció a Marleny Orjuela, quien está al frente de una asociación de familiares de los secuestrados y que todos los martes hacen una jornada en la céntrica Plaza de Bolívar para pedir por la libertad de los militares y policías.
Mendieta contó que programas de radio como 'Las Voces del Secuestro', mediante el cual se envían mensajes a los secuestrados, fueron claves para mantener contacto con el mundo exterior en los 12 años del cautiverio que vivieron en las profundidades de la selva.
'En los últimos 16 meses no tuvimos radio y estábamos aislados', relató el uniformado, tras lo cual agregó que hace 20 días grabaron pruebas de vida para sus familiares que 'deben venir en camino'.
Los cuatro rescatados por las fuerzas militares colombianas fueron trasladados a un club de la Policía Nacional para un encuentro privado con sus familiares y luego pasarán a chequeos médicos en el Hospital de la Policía de Colombia.
