Llegan a su madurez
MÉXICO, DF.- Dos discos de platino, tres nominaciones los MTV, dos Premios Oye!, y dos nominaciones al Grammy. En suma, ocho años de éxito popero. Pero apenas hasta ahora, con su tercer álbum, han encontrado el "sonido Motel".
Se trata, según palabras del vocalista Rodrigo Dávila, de un pop maduro y versátil pero, sobre todo, hecho con la experiencia que han acumulado desde 2002, aquel año en que comenzaron a tocar en bares de la Ciudad de México.
"El problema -dice Rodrigo- es que luego de tanto éxito, hay un integrante de la banda que quiere ser solista".
En eso voltea a mirar a Rubén Puente, el bajista de la banda, quien es también el más callado del cuarteto. Luego de unos segundos de incertidumbre, todos se ríen a carcajadas.
Es que es común que el tercer disco en las bandas de pop sea una especie de manzana de la discordia porque aparece la tentación de que alguien quiere ser solista, como sucedió por ejemplo con Elefante y su vocalista Reyli.
Pero la broma de Rodrigo es un "no" absoluto a los egos y las vanidades dentro del grupo Motel.
"En nuestro caso encontramos una forma de trabajar muy buena; es algo que practicamos en discos anteriores, pero en éste lo manejamos mejor. Es difícil que lo crean pero en este disco fuimos un mucho mejor equipo que en las grabaciones pasadas", dice Rodrigo.
Pepe Damián retoma la broma: "No había querido decirles pero la verdad es que me han ofrecido ser solista... de batería", y todos vuelven a reír.
EL TERCERO NO ES EL VENCIDO Este tercer disco se llama Multicolor y el primer sencillo, Somos Aire. La grabación del video sucedió la semana pasada bajo la dirección de Pablo Dávila, pariente de Rodrigo.
"Nos salieron muy talentosos los Dávila", dice Rubén en referencia no sólo al director del video, sino a Álvaro Dávila, padre del vocalista.
Precisamente Rodrigo Dávila es quien explica: "Creo que fuimos afortunados en encontrar a alguien cercano como Pablo para dirigir este video.
"Él es como de la familia Motel y tiene una visión que ha entendido muy bien el concepto de la canción".
Somos Aire es una abstracción sobre un amor que no se sabe si comienza, si ya terminó, o si comienza a terminar.
¿Es feliz o es triste?, ¿es amor o desamor? Billy Méndez, el compositor de cabecera de la banda y su guitarrista, revela: "Es una canción feliz con tintes de nostalgia. Habla de hacer un esfuerzo por celebrar el ahora pero con una constante, que es estar consciente de que el tiempo avanza. De alguna manera se agradece el pasado pero nos centramos en el ahora".
EL SONIDO Y LOS FANS Lo más importante para ellos es que, como explicaban al principio, han encontrado el "sonido Motel".
"Todos los discos son importantes, pero en cuestión de sonido, éste es donde todos podemos ya reconocer el sonido que ha atravesado los tres discos y que sigues escuchando. Ubicar nuestro sonido fue algo increíble".
Tiene razón Rodrigo al decir que todos sus discos tuvieron su importancia.
El primero fue el que les permitió gozar de la popularidad instantánea, de la fama pop; mientras que el segundo los llevó a su primera gira por Centroamérica y España, donde incluso tienen un club de fans. "El hecho de que una persona busque tus discos, vaya a tus conciertos y quiera seguirte de a gratis, es una demostración de cariño insuperable", dice Rodrigo a propósito de los admiradores de su banda.
Por eso mismo, se muestran entusiastas y emocionados cada vez que encuentran a alguien que se interesa en su música. Sucedió así durante la grabación del video de "Somos aire".
En el receso, los músicos aceptaron saludar a un par de chicas, estudiantes de preparatoria, del Colegio Simón Bolívar, que trabajan en el proyecto de una radio escolar.
No sólo las saludaron y platicaron con ellas sino que grabaron un saludo para su naciente programa.
"Hola, somos Motel, y sigan escuchando Nuggets Teen", dijo Billy, y luego dijo: "Estas experiencias valen la pena más que cualquier fama".
