No quieren venir. La violencia en el país ahuyenta a los paisanos que lo visitan, aseguran autoridades. ARCHIVO
El clima y la inseguridad fueron factores importantes para que el flujo de paisanos durante el verano se desplomara en su cruce hacia México, ya que disminuyó en Tamaulipas un 29% al haber cruzado 93 mil 748 contra 163 mil 51 que lo hicieron durante el verano del año pasado, informó Aurelio Alamán Bueno, delegado regional del Instituto Nacional de Migración (INM).
Dijo que por Nuevo Laredo cruzaron esta temporada 47 mil 442 paisanos contra 70 mil 195 que lo hicieron el año pasado, lo que representa una disminución en cuanto a cruces a México, del 32%.
Fue durante una reunión de evaluación del Programa Paisano en la que estuvieron funcionarios de los tres niveles de gobierno de Laredo, Texas y de Nuevo Laredo, en que se consideró que esos factores fueron decisivos para que el flujo de paisanos disminuyera de esa manera.
En lo que se refiere a las deportaciones, mencionó que también disminuyeron al tener un registro de 37 mil repatriados este año o un 8% menos que el año pasado, aunque dijo que en el resto del estado las deportaciones aumentaron a razón de un 40% como promedio.
"Las deportaciones aumentaron, menos en Nuevo Laredo, ya que en Matamoros aumentó hasta en un 160%, mientras que en Reynosa fue de un 35%", explicó el funcionario tras mencionar que en lo que va del año suman poco más de 77 mil mexicanos repatriados, de los que 55 corresponden a Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Señaló que el aumento en el resto de los municipios se debe en parte a que por Ciudad Juárez ya no se repatrían mexicanos, y que el impacto en Nuevo Laredo no es tan fuerte como en el resto de la entidad.
Respecto a los lugares de origen siguen siendo Guanajuato, Zacatecas, Centro de México y Tamaulipas, pero de donde son repatriados vienen de Atlanta, Miami y Chicago, principalmente, lo que no indica mucha variación con respecto a años anteriores.