El marchista mexicano Horacio Nava se llevó la medalla de plata en la prueba de los 50 kilómetros de la Copa del Mundo Chihuahua 2010 tras cruzar la meta con un tiempo de 3h54.16. (EFE)
Horacio Nava aguantó el cansancio, el calor extremo y la presión de ser considerado uno de los favoritos en los 50 kilómetros de la Copa del Mundo Chihuahua 2010. Sin embargo, el marchista mexicano no pudo contener al eslovaco Matej Toth, quien sorpresivamente lo rebasó en el último kilómetro de la competencia y le robó el oro que ya sentía en las manos.
Pese a mantenerse como líder desde la quinta vuelta y hasta el kilómetro 48, el chihuahuense no supo reponerse del empuje del europeo y subió al podio a recibir la plata, con un tiempo de 3:54.16 horas, 46 segundos después que Matej. El bronce fue para el australiano Jared Tallent, doble medallista olímpico en Beijing (3:54.55).
Aún así y pese a que le hubiera gustado lograr el oro en su estado natal, el andarín de 28 años escribió su nombre en la historia del deporte mexicano al subir al podio en su especialidad tras 17 años de ausencia tricolor. "Fue un logro muy importante para mí la medalla de plata. Me arriesgué a mantener el ritmo y desafortunadamente no pude alcanzar a Matej. El resultado de hoy es muy valioso y hay que darle la dimensión que se merecen las cosas. Tomando en cuenta la calidad de la competencia creo que la gente se fue contenta", dijo Horacio al borde de las lágrimas. Casi dos décadas después de que Carlos Mercenario subiera a lo más alto del podio en Monterrey 1993, Horacio fue profeta en su tierra al ubicarse entre los tres primeros. Cobijado por el apoyo de sus coterráneos, el seleccionado olímpico tomó la punta muy temprano en el circuito de dos kilómetros de la Unidad Deportiva Sur.
Sigiloso, Tallent lo siguió de cerca al igual que los mexicanos Omar Zepeda, Cristian Berdeja y José Leyver, quienes con el paso de los kilómetros se fueron rezagando. Mientras, el eslovaco protagonizaba un discreto recorrido sin figurar entre los primeros sitios. Con el sol cayendo a plomo, los equipos mexicano, australiano y chino comenzaron a mostrar su estrategia para conseguir los primeros lugares. Mantas de apoyo a Horacio, héroe local, amenizaron el recorrido que inició con 58 marchistas.
"Quizá aún no estoy preparado para ganar, pero me queda mucho camino que recorrer de aquí al Campeonato Mundial el año próximo y a los Juegos Olímpicos en 2012. El deporte da revanchas y creo que después de recibir tantas críticas en el Mundial de Berlín, demostré que tengo la capacidad de estar entre los mejores a nivel mundial", añadió el mexicano. Para Matej Toth, quien comenzó a devorar el asfalto pasado el kilómetro 45, fue un día histórico, ya que se convirtió en el primer eslovaco que gana una presea en competencias mundiales. "Nunca pensé que iba a ganar. Apliqué la técnica de ahorro de energía en la que te cuidas los primeros 40 kilómetros. Estoy muy contento con el resultado y ahora sólo pienso en ver a mi esposa y mis dos hijas", dijo.
