Los objetivos de Lorena Ochoa para 2010 son muy claros: ganar todos los trofeos de la LPGA y volver a saborear las mieles de un Major.
Los objetivos de Lorena Ochoa para 2010 son muy claros: ganar todos los trofeos de la LPGA y volver a saborear las mieles de un Major.
“Como todos los años, busco ganar todo. Quiero quedar en el primer lugar al término de la temporada.
Le quiero dedicar mucha atención a los Majors, que serán muy importantes para 2010”, comentó Ochoa tras concluir su participación en un Torneo ProAm, en el Campestre Churubusco, con el objetivo de recaudar fondos para las golfistas mexicanas que participarán en el Futures Tour.
La número uno del mundo cambió su domicilio a la Ciudad de México al contraer nupcias. Una nueva situación que ha generado el traslado de algunos días de Rafael Alarcón a la capital para supervisar su entrenamiento en la pretemporada.
“Me motiva el estar casada porque nunca había estado tan contenta y la felicidad te ayuda mucho para que las cosas sean más fáciles. Me siento muy tranquila y lista para que arranque la temporada”, comentó la tapatía, quien tendrá su primer torneo de la LPGA en Tailandia, del 18 al 21 de febrero.
Aunque el calendario de la gira femenil más importante del mundo se vio reducida a sólo 24 torneos, a Lorena le sienta mejor en su planeación personal. Augura que los problemas económicos del tour han pasado y que este año será de recuperación.
En la presente temporada no será la única mexicana. Tendrá la compañía de Tanya Dergal, quien deberá jugar una calificación los lunes para acceder a los torneos.
“A Tanya la felicito por alcanzar la tarjeta condicional. Ha estado entrenando mucho en Estados Unidos para jugar las calificaciones. El lugar que tiene es muy bueno, creo que debemos ser optimistas porque no fue fácil llegar ahí. Ahora debe ser paciente y poco a poco se le darán los resultados”, dijo.
Entre los cambios técnicos que realizó en las últimas semanas está la manera de agarrar el bastón y una posición más centrada con el putt.
Ante las múltiples noticias generadas por la confesión de Tiger Woods sobre sus infidelidades, Lorena comentó que no tiene los elementos para emitir un juicio, pero que su manera de manejarse fuera de los campos es muy diferente.
“Mi prioridad en la vida es ser coherente, tener un buen equilibrio en la parte personal, la cual siempre será la más importante. Mi meta se mantiene en dar una buena imagen para que los niños y las niñas puedan seguir mis pasos”, aclaró la golfista.