El tenista suizo Roger Federer devuelve una bola al francés Paul-Henri Mathieu, durante el partido de tercera ronda del Abierto de Tenis de Estados Unidos que se lleva a cabo en el USTA National Tennis Center en Nueva York. (EFE)
AP
- El español es el idioma oficial del Abierto de Estados Unidos.
Albert Montañés prolongó ayer la excepcional campaña del tenis español en el último Grand Slam de la temporada al avanzar a los octavos de final, una instancia totalmente inhóspita en las grandes citas para un jugador que vive a la sombra de Rafael Nadal y que ha encontrado su mejor momento al rozar los 30 años.
Montañés, vigésimo primer cabeza de serie, apenas necesitó estar en cancha 38 minutos luego que su rival japonés Kei Nishikori abandonó por una dolencia en la pierna izquierda y con el español en ventaja 6-1 y 2-1. A Nishikori, 147 del mundo, le pasó factura el esfuerzo de su anterior partido, en el que jugó casi cinco horas para vencer a Marin Cilic, el undécimo preclasificado.
Para Roger Federer, el viento en el estadio Arthur Ashe fue lo único que incomodó al suizo y segundo cabeza de serie, al ganar otro partido en sets corridos, un 6-4, 6-3 y 6-3 sobre el francés Paul-Henri Mathieu para certificar el pase a octavos.
"Qué fuerte sopló el viento, es un alivio haber avanzado", dijo Federer, quien busca su sexto título en Nueva York.
Federer sirvió 13 aces y levantó las cuatro bolas de quiebre con su saque. Cuando Mathieu dispuso de una oportunidad de ruptura en el octavo game, Federer conjuró el peligro y barrió los siguientes tres games para llevarse el parcial. Históricamente, la selva de cemento de Flushing Meadows había sido el terreno más difícil para los españoles. Pero el panorama actual es tan halagador que Nadal, número uno del mundo, lo catalogó como "impresionante".
Nadal lideró una cifra récord de nueve españoles entre los 32 mejores del certamen, la mayor cantidad por parte de un país.
Y ahora Montañés puso en marcha el asalto a los octavos de final.
Treinta y seis son los Grand Slam que Montañés ha disputado en su carrera de más de una década, pero nunca había tenido tanto éxito como en esta temporada, en el que alcanzó la tercera ronda en Australia, Francia y Wimbledon.
Para un jugador especialista en arcilla, el alcanzar la segunda semana de un Grand Slam que se juega en cemento es particularmente llamativo.
"Siempre hubiese pensado en Roland Garros por ser en tierra. Esperas siempre una cosa en un torneo y luego te llega en otro", declaró Montañés.
Nadal estimó que nadie se debe sorprender ante la sucesión de victorias españolas y menos que sean en superficie rápida. "Los números están ahí. Ya no es un tema el que los españoles juegan bien en todas las superficies", afirmó. "Es que no hay otra: la mayor parte de la gira es en cemento".
El siguiente rival de Montañés será el sueco y quinto preclasificado Robin Soderling, quien se deshizo 6-2, 6-3 y 6-2 del holandés Thiemo de Bakker.
Habrá un duelo francés en octavos, entre Gael Monfils (17) y el resurgente Richard Gasquet. Monfils 7-6 (4), 6-7 (4), 6-2 y 6-4 derrotó al serbio Janko Tipsarevic para acceder a la etapa de los 16 mejores por tercer año sucesivo. Si su deseo es superar esa valla tendrá que hacerlo a costa de Gasquet, victorioso 6-4, 7-6 (3) y 7-5 sobre el sudafricano Kevin Anderson. Otros victoriosos en el día fueron el estadounidense Mardy Fish (19) y la belga Yanina Wickmayer (15).
La jornada de ayer también incluía las presentaciones de Novak Djokovic y Juan Carlos Ferrero.