Oswaldo Sánchez tendrá un duelo muy especial esta tarde en el Territorio Santos Modelo, ya que la portería rival estará defendida por Guillermo Ochoa. (Archivo)
La semifinal del futbol mexicano entre Santos Laguna y América, con ventaja para los albiverdes en el partido de vuelta, pudiera ser definida por los arqueros con sus atajadas.
El tres veces mundialista y experimentado Oswaldo Sánchez, defiende a los Guerreros, mientras que Guillermo Ochoa lo hace por las Águilas. Ambos poseen grandes cualidades y hoy en día, son los mejores de México.
Por decisión del "Vasco" Aguirre, el capitán santista no fue llamado para disputar por México la Copa del Mundo 2010, mientras que Ochoa se resignó a ver el Mundial de Sudáfrica en el banquillo, cuando se perfilaba para ser titular.
Oswaldo vive la recta final de su exitosa carrera, donde se incluyen Juegos Olímpicos, tres Mundiales, torneos internacionales, donde hasta se ha dado el lujo de anotar goles y dos títulos del futbol mexicano.
Desde su llegada a Santos Laguna en 2007, se ha notado el liderazgo del cancerbero tapatío, expresando que desea retirarse con el equipo de la Comarca.
Pocas veces falla, pero las lesiones ya comienzan a cobrarle factura, de hecho, ya no realiza los despejes largos en los saques de meta.
Ochoa por su parte, le ha dado un soporte al arco americanista, con una regularidad muy aceptable y que no se veía desde hace tiempo en Coapa, cuando Adrián Chávez se consolidó entre los 80's y 90's.
Es joven, pero ha sabido controlar la enorme responsabilidad de estar bajo el marco azulcrema, incluso con sus lances y atrapadas, ha llevado al América a grandes latitudes, a pesar de tener defensivas que no terminan de cuajar, pero los ayuda con sus actuaciones.
Estos porteros ya se hicieron notar en la ida de las semifinales, aunque el americanista tuvo que emplearse a fondo para contener a la artillería lagunera, integrada por Benítez, Quintero, Cárdenas y compañía.
Oswaldo también fue clave, al ganarle un mano a mano a Vicente Sánchez, cuando el uruguayo recibió un gran servicio de Montenegro, en una mala entrega de Jonathan Lacerda, pero de ahí en más, no pasó mayores problemas.
Por presencia y liderazgo, ambos ocupan lugares privilegiados y son respetados por lo realizado en la cancha, pero la experiencia a estas alturas de la liguilla pudiera ser determinante. Por eso en los Mundiales, los porteros de la mayoría de las selecciones participantes, rebasan con facilidad los 30 años de edad.
Por si fuera poco, los guardametas son ídolos con los seguidores de sus respectivos equipos, sobre todo con el lado femenino, llevándose toda clase de piropos.
El sufrimiento de los arqueros llega con los balones aéreos, por lo que buscan estar atentos para colgarse del esférico y prevenir cualquier tipo de problemas.
Desde la cabalística fecha 13 de la campaña, cuando perdieron 1-2 ante el también semifinalista Monterrey, Oswaldo y su sólida defensa no permiten más de un gol por partido.
En los últimos tres cotejos como local, incluida la liguilla, en 270 minutos, apenas aceptó un gol de los rivales, en los botines de Omar Arellano, cuando las Chivas empataron en el último suspiro.