Opciones. El único puente peatonal de la zona se ubica a la altura del bulevar Domingo Arrieta y calle Nicolás Luna.
Las cuchillas, en los bulevares Dolores del Río y Domingo Arrieta, se convierten en una de las zonas más peligrosas para el cruce del peatón. Hay semáforos, pero no siempre se respetan.
Actualmente el lugar se ha convertido en un sitio predilecto para los paseantes, quienes gustan de acudir a las actividades de esparcimiento y culturales que ahí se realizan.
También, este sitio es ya fondo de las fotografías de muchas quinceañeras, bodas y otros eventos sociales, por sus coloridas fuentes y jardínes.
No obstante, para llegar a este espacio, en ocasiones la gente tiene que correr para evitar ser embestida por los automóviles, ya que por ejemplo en el caso del bulevar Domingo Arrieta, a pesar de que al dar vuelta de Dolores del Río, de inmediato hay un escondido semáforo peatonal que nadie atiende.
Hay otro semáforo, para incorporarse al bulevar para quienes llegan de distintas calles, mismo que no toman en cuenta quienes ya se pasaron el primero señalado al venir de Dolores del Río.
Luego hay otro para ceder el paso a quienes cruzan la calles y dar oportunidad de retorno a quienes circulan de sur a norte y unos cuantos metros adelante hay otro sólo peatonal.
LA OTRA ALTERNATIVA
A media altura de la cuchilla, existe otro semáforo que sólo funciona con un interruptor que el transeúnte debe presionar si quiere pasar la vialidad; sin embargo, hay que esperar un poco para que se haga el cambio de luz e ir al pendiente de que realmente los vehículos que vienen tengan intención de frenar.
Por esta causa, hay quienes prefieren esperar a que no pasen los automóviles para pasar, como Jesús Rodríguez Íñiguez, vecino del lugar, quien comentó que prefiere no arriesgarse.
