El coordinador del Partido Acción Nacional (PAN) en el Senado, Gustavo Madero, informó que ya limó asperezas con el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro.
El pasado 1 de junio, Madero le respondió al rector, quien pidió presupuesto y comprensión para la educación pública superior, que también es importante dar resultados y rendir cuentas, además de mejorar los niveles de educación de manera permanente.
El panista le aclaró entonces que la UNAM recibe más fondos en toda la educación superior y es necesario que los recursos se traduzcan también en una mejora en la educación, además de patentes, descubrimientos, y aportaciones, lo que generó una respuesta de la máxima casa de estudios y polémica por las reflexiones del panista.
Madero informó que ya limó asperezas con el rector de la UNAM, José Narro Robles.
Dio a conocer que la semana pasada habló con él vía telefónica y envió una carta en la que quedó perfectamente aclarado en qué términos se dio su declaración.
Informó que durante los diez años de gobiernos del PAN, la UNAM ha triplicado el presupuesto y pasó de 8 mil 39 millones de pesos en 1998 a 24 mil 337 millones en 2010, un crecimiento de 330% en pesos corrientes, y de 63% en términos reales.
En entrevista, dijo que sus declaraciones fueron sacadas de contexto, pues nunca asumió que el rector pedía más presupuesto "ni que yo estaba condicionando para que tuviera más presupuesto, diera más transparencia... esos fueron declaraciones sacadas de contexto".
Confirmó que con esto quedó aclarada su declaración inicial, y que toda la polémica fue por gente que leyó mal su opinión y trató de politizar el tema, como si fuera una actitud del PAN "de hostigamiento a la educación pública".
Opinó que su declaración inicial fue "equilibrada" y no trató de ser provocadora. Consideró que hubo una "sobre reacción", porque la educación pública es un patrimonio de todos los mexicanos, y aclaró que no quiso criticarla.
Dijo que lo que debe haber es una exigencia de superación, para cada vez lograr más, "ese espíritu de superación permanente" de dar cuentas, de transparencia, y medirse con mejores indicadores, para que todos los logros se compartan y animen a avanzar cada vez más.
