Males. Ambos padecimientos deterioran la calidad de vida de las personas.
La hipertensión arterial y la diabetes mellitus son enfermedades que minan la salud de las personas y además significan un alto costo material y humano para las instituciones que las atienden.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, en el estado de Durango se registraron más de 10 mil casos nuevos de hipertensión arterial en toda la entidad, aunado a seis mil 700 de diabete, durante 2009.
Se indicó al respecto que estas dos patologías requieren de una asistencia médica de por vida una vez que son diagnosticadas, la que debe ser reforzada con cambios radicales en los estilos de vida y alimentación, para contribuir al control del problema metabólico.
En ambos casos, el problema se presenta desde la segunda década de la vida pero se acentúa en el grupo de edad de 50 a 59 años.
No existe diferencia alguna en cuanto al mecanismo de medicación, tratamiento, continuidad y vigilancia de los pacientes.
Dentro de las categorías donde se encuadran los problemas crónicos como es la diabetes y la presión arterial elevada, son padecimientos que implican de una gran carga de atención para las instituciones encargadas de la atención.
La diabetes expone al paciente a una serie de riesgos que van desde la descompensación en su sistema metabólico general, mientras que en casos de descuido severo se puede presentar disfunción renal, pérdida de agudeza visual incluida la ceguera, así como amputaciones de miembros inferiores.
La hipertensión arterial aumenta el riesgo de infartos cerebrales o ataques al corazón. En ambos casos la vigilancia médica es vital.
Consejos Médicos
Cuidado
Las complicaciones son:
⇒ Diabetes: disfunción renal, pérdida visual, amputaciones.
⇒ Hipertensión: ataques al corazón, infartos cerebrales.