La nómina de empleados municipales se mantiene seis millones de pesos por encima del nivel al inicio de la Administración, según las cuentas públicas de julio que fueron ayer aprobadas por mayoría en la sesión de Cabildo.
El gasto en sueldos y honorarios en julio fue de 35 millones de pesos, ya sin el pago de finiquitos, que en meses anteriores había utilizado el Municipio como argumento para justificar que la nómina fuera alta.
La actual administración arrancó con una nómina de 29 millones de pesos.
Marzo fue el mes en que el Municipio gastó más por concepto de nómina, ya que se pagaron 39 millones, de los cuales tres millones fueron finiquitos, es decir, que en total la nómina fue de 36 millones.
Autoridades municipales prometieron estabilizar el gasto en mayo y luego en junio, lo cual no ha sucedido.
El alcalde Eduardo Olmos había anunciado que para septiembre se recortarían dos millones de pesos a la nómina, pero esta reducción no regresará el gasto a los niveles de enero.
Este rubro es todavía la mayor carga financiera para el Municipio ya que ha consumido totalmente sus ingresos propios, mientras que la recaudación de recursos vía impuestos es baja.
Mientras que el Municipio tuvo ingresos propios por 165 millones de pesos de enero a junio, se gastaron 180 millones 625 mil pesos en el pago a trabajadores sindicalizados, de confianza, así como los que cobran por honorarios, según el análisis de gestión financiera presentado ayer en la sesión del Cabildo.
En cuanto a honorarios, en julio hubo 543 trabajadores que cobraron bajo esta modalidad, contra 441 en abril, pero la cantidad total erogada fue similar, alrededor de cinco millones cada mes, de acuerdo con la Cuenta Pública.
