Unidos. Manifestantes protestan de forma pacífica para recordar el asesinato de 15 jóvenes.
CIUDAD JUÁREZ, CHIHUAHUA. - Encabezados por María Dávila, quien perdió a dos de sus hijos en la agresión del fraccionamiento Villas de Salvárcar, el 31 de enero, se realizó ayer en esta frontera la marcha de Coraje, Dolor y Desagravio.
El contingente partió del Monumento a Benito Juárez hacia el Puente Internacional conocido como "Libre", con más de dos mil personas de diferentes sectores de la sociedad. En este punto, los manifestantes se tiraron al piso por cinco minutos, simulando los fallecidos que ha dejado la delincuencia organizada aquí.
Los asistentes en su mayoría vestían ropa negra, muestra simbólica del luto que se vive en Ciudad Juárez, en recuerdo de los 15 jóvenes que fueron asesinados cuando se encontraban en una fiesta.
Con pancartas, los manifestantes exigieron justicia y que la violencia termine de tajo en la entidad, pero sobre todo, que ningún otro inocente muera injustamente.
"Lo que pasó en Villas de Salvárcar que sirva de ejemplo a las autoridades porque no queremos ya que esto se repita, quieren nuestra ayuda los gobernantes, pues aquí la tienen, ahora ellos que cumplan con su parte", dijo María Dávila a las autoridades de los tres niveles de Gobierno.
El movimiento fue pacífico, a pesar que algunos jóvenes preparatorianos y universitarios se enfrascaron en discusiones con policías municipales, los cuales resguardaban la integridad de terceras personas en la caminata.
Algunos escribieron leyendas en unidades de las policías Federal, Municipal y de Tránsito local, sin embargo, ambos bandos guardaron serenidad y no pasó a mayores.
La marcha Coraje, Dolor y Desagravio por Juárez, fue convocada por diversos sectores en las redes sociales como Twitter y Facebook, y la idea, según María Dávila, es que "las autoridades sientan y escuchen el clamor del pueblo juarense que está cansado" de tanta violencia.
MARÍA DÁVILA
Madre de las víctimas