Víctimas colaterales. El domingo pasado fueron asesinados 10 jóvenes, siete de ellas menores de edad en el municipio serrano de Pueblo Nuevo, Durango. ARCHIVO
MÉXICO, DF.- Con un total de 958 ejecutados, marzo es el mes más violento desde 2005, cuando escaló la guerra entre grupos de la delincuencia organizada en el país.
Según las estadísticas periodísticas, el récord lo tenía enero de este año, con 937 homicidios, seguido de diciembre de 2009, con 842.
En el Gobierno del presidente Felipe Calderón, cuando inició la lucha frontal contra la delincuencia organizada, han muerto 18 mil 757 personas.
En los últimos 27 meses, Chihuahua, encabeza la lista como el estado con más crímenes, la mayoría de éstos ocurrieron en Ciudad Juárez. En este mes se contabilizaron 670 homicidios, cuatro en las últimas 24 horas.
La muerte de tres personas vinculadas al Consulado de Estados Unidos, el 13 de marzo pasado, desató la alarma de las autoridades estadounidenses.
A raíz del triple homicidio, México y Estados Unidos anunciaron la creación de un plan para intentar revertir la violencia que azota a Ciudad Juárez.
Se incluye el establecimiento de un sistema de rastreo satelital para patrullas y radiotransmisores, además de la instalación, en El Paso, Texas, de una oficina de polígrafos en donde operen hasta 15 expertos mexicanos y una más para que un número similar de funcionarios de México trabajen y archiven pesquisas.
Con 155 homicidios, Sinaloa ocupa el segundo lugar con más homicidios en marzo, seguido de Guerrero, con 109.
Este periodo también se caracteriza por el aumento de víctimas colaterales, entre las que destaca la muerte de 10 personas, siete de ellas menores de edad en el municipio serrano de Pueblo Nuevo, Durango, el domingo pasado.
Una semana antes, dos estudiantes del Tecnológico de Monterrey perecieron al quedar en el fuego cruzado entre sicarios y militares frente al plantel. Con unas horas de diferencia, nueve comuneros fallecieron al quedar en medio de una balacera en la autopista Culiacán-Mazatlán.
HALLAN 4 CABEZAS EN MICHOACÁN
La madrugada de ayer, junto al monumento al general Lázaro Cárdenas, ubicado en el municipio de Apatzingán, Michoacán, desconocidos abandonaron cuatro cabezas humanas.
Policías estatales localizaron los restos de tres personas en un camino que conduce a la comunidad El Sáric, municipio de Nogales, Sonora.
El Gobierno de Tamaulipas informó que en San Fernando, la Delegación de Seguridad Pública Municipal y la comandancia de la Policía Ministerial del Estado sufrieron un atentado con balazos y explosivos.
En Reynosa, un enfrentamiento entre militares y sicarios dejó un muerto y en Nuevo Laredo, se localizó el cuerpo de un hombre.
Cuatro ejecuciones más se registraron en Tijuana, Baja California; dos en los Mochis, Sinaloa, y una en Guerrero.
Ayer fueron presentados por el Ejército otros dos implicados en la masacre de Villas de Salvárcar, en Ciudad Juárez, donde murieron 15 personas, en su mayoría estudiantes.