Los bailarines. Como siempre el cuerpo de bailarines de los integrantes de Mezquite mostraron profesionalismo y pasión. EL SIGLO DE TORREÓN / JESÚS HERNÁNDEZ EL SIGLO DE TORREÓN / JESÚS HERNÁNDEZ
A la hora de la hora, el talento es el que habla. Y Mezquite Danza Contemporánea no necesitó más que presentar un verdadero discurso corporal sobre el escenario durante su presentación del pasado miércoles en el Teatro Isauro Martínez, para confirmar por qué es uno de los proyectos más sólidos de La Laguna.
Seis coreografías de repertorio fueron interpretadas por la compañía lagunera, en un programa donde el movimiento además de adquirir vida, fue un lenguaje en el que sobresalió la técnica, disciplina y compromiso de los bailarines.
Una gran alegoría de la tragedia neoyorkina del 11 de septiembre, fue revivida por el director de Mezquite, Jaime Hinojosa, durante su interpretación de la coreografía de Ruby Gámez "Recuerdos de Nueva York". Confirmando porque a la hora de pararse sobre el escenario el jefe es el jefe.
Quien sorprendió durante la introducción de la tercera coreografía, fue la bailarina Lizeth Ramírez, quien además de precisión transgredió el plano de lo cotidiano de su personaje.
Sara Ovalle, Aarón Rivera y Christian Leyva, parte del cuerpo de bailarines de Mezquite, imprimieron a la hora de bailar, un sello de calidad y pasión.
