Uno de los 33 mineros chilenos rescatados, José Ojeda, autor del famoso mensaje: "Estamos bien en el refugio los 33'', reveló que antes de ser ubicados por rescatistas él y los otros mineros atrapados bajo tierra bebieron orines para no tomar agua contaminada, según una entrevista publicada ayer por el periódico El Mercurio. En el refugio había comida y agua para pocos días y sólo para un puñado de personas. "Encontramos 10 litros de agua mineral sin gas y 18 litros de leche, ocho litros estaban agrios, malos, no se podían tomar'', contó Ojeda, perforista, viudo, sin hijos. Consultado si es cierto que bebieron orina, el minero respondió: ''Sí, yo lo hice al séptimo día''. Se lo comenté a los demás, y me dijeron que estaba loco'', dijo. "Otros prefirieron tomar agua contaminada que estaba en unos tambos. Fue raro también que nadie se enfermara, y así nos lo dijeron los médicos cuando la analizaron''. Ojeda desmintió versiones de que los mineros comieron ratones. "En las minas hay ratas, pero allá, a 700 metros, no había nada... sólo calor insoportable y mucha, mucha humedad'', dijo. El calor bordeaba los 39 a 40 grados Celcius y la humedad alcanzaba el 90%.
También había una docena de latas de atún en conserva.
"Nos pasábamos el alimento en una cuchara pequeña, al final pudimos soportar 72 horas sin comer... Ahí nos encontraron'', relató Ojeda.