El Señor hizo al hombre.
(Ingrato, el hombre se deshacería alguna vez de Dios).
Luego el Señor hizo a la mujer de una costilla del hombre.
(Ingrata, la mujer jamás le ha agradecido al hombre su costilla).
Cuando Adán y Eva se contemplaron por primera vez, se unieron en un perfecto abrazo del cual nació la vida.
El Espíritu vio aquello, y le dijo al Creador:
-¡Qué obra tan bella! ¡Hiciste al hombre y la mujer, y les diste el regalo del amor!
-Te equivocas -lo corrigió el Padre-. Yo hice a la mujer y al hombre, es cierto, pero ellos inventaron el amor.
¡Hasta mañana!..