Llegó sin previo aviso y me espetó:
-Soy mañana.
Me sorprendió su dicho. Si era mañana ¿por qué se presentaba hoy? Así se lo dije, y respondió:
-El mañana es casi hoy, y el hoy es casi ayer, de modo que eso no importa mucho. Le pido entonces que denuncie la falsedad de la frase popular según la cual "Mañana será otro día". La verdad es que todos los días son el mismo día. La diferencia está en lo que cada quién haga con el día que le toca vivir.
Sus palabras me sonaron tan profundas que no quise responderle hoy. Mañana le responderé, aunque mañana no sea otro día.
¡Hasta mañana!..