ACERTADA ES LA medida tomada por el Ejecutivo federal con relación a la nueva política de cambio, venta y compra de dólares en el sistema bancario mexicano.
EL DÍA DE AYER el secretario de Hacienda y Crédito publico, el licenciado Ernesto Cordero junto a Guillermo Babatz presidente de la Comisión Nacional de Fondo y Valores, informaron a la prensa nacional que con el fin de combatir al crimen organizado en donde más le duele, en el estómago, el Gobierno de Felipe Calderón establecerá una serie de controles para el intercambio de dólares norteamericanos en las instituciones del servicio bancario mexicano.
LA MEDIDA busca evitar el “lavado” de dinero mediante las operaciones de divisas, que incluye la compra de dólares por parte de los bancos, la recepción de depósitos, pago de créditos y de servicios con aquellas divisas.
POR LO QUE RESPECTA los particulares no cuentahabientes, sus operaciones en dólares serán limitados a 300 dólares diarios. A los cuentahabientes extranjeros se les limitará el cambio de dólares en efectivo a pesos hasta en 1, 500 dólares y viceversa. El límite para las personas morales será de 7, 000 dólares en zonas turísticas o en la franja fronteriza. Las personas físicas que sean cuentahabientes podrán realizar operaciones hasta por cuatro mil dólares al mes.
LA MEDIDA BUSCA CONTROLAR la compra de dólares por parte de los bancos, que han sido hasta ahora, el gran agujero por donde el crimen organizado “lava” el dinero. Son los bancos el lugar en donde el crimen puede cambiar los millones de dólares que obtiene del delito (que se calculan 29 mil millones de dólares al año) de pesos a dólares y de dólares a pesos.
SE LLEVARÁ un control, monitoreo y base de datos de las personas físicas y morales que realizan operaciones en dólares, con el fin de poder saber quiénes son, a qué se dedican, su registro fiscal, etc.
ADEMÁS HACIENDA DICTARÁ en estos días una serie de medidas y reglas para regularizar la actuación de la banca en sus operaciones de compra, depósitos, recepción, de pago de créditos y transferencias de fondos. Son estos actos bancarios por medio de los cuales el crimen organizado puede blanquear, “lavar”, trasladar y esconder el producto de sus delitos. Quizá quedaría pendiente una mayor vigilancia de las Casas de Cambio o de divisas, las que tampoco hacen malos quesos en esta materia.
LA MEDIDA PARECE buena y va al fondo real del problema, pues un golpe al estómago del crimen, le es más doloroso que un golpe al corazón. Al respecto bástenos recordar aquellas escenas de la película Cara Cortada protagonizada por Al Pacino, cuando llega una camioneta a las puertas de un banco y los delincuentes bajan una serie de bolsas llenas de dólares para depositarlos, ante la mirada entusiasta del gerente que se asoma a la ventana. Aquí está uno de los puntos clave de la guerra en contra del crimen y ojalá se logre cumplir esas medidas.