ESTE FIN DE AÑO le toca a las autoridades que nos gobiernan y a los tres niveles y poderes, hacer su propio examen de conciencia y balance de su actuación, como empleados que son del pueblo que les paga. Para ello deberán plantarse frente a su espejo favorito (aquel mismo ante el cual y en soledad le preguntan diariamente: ¿Dime espejito quién es el político más fregón en este mundo?), y ahí ante ese mismo espejo la cuna de su narcisismo, en un acto de contrición preguntarse: ¿He cumplido con el pueblo que me paga para servirle durante este año?
EL ESPEJO QUE es de material vidrioso, por lo que no tiene ningún compromiso con el político de marras, antes de proceder a darle la respuesta se retuerce como si padeciese un agudo cólico y contesta: “Has resultado un pésimo administrador, no sabes cobrar impuestos, no sabes gastarlos y lo que es peor has estado manoteándolos todo 2010 y también los pasados años; no sabes ni has podido cumplir ni hacer cumplir la ley ni tampoco castigar a los criminales; con mucha facilidad, quizá ya por mero vicio, caíste en la corrupción; no has sabido, podido ni querido darle seguridad a tus gobernados que vivieron 365 días de terror y miedo; el país se está deshaciendo en tus inexpertas e incapaces manos y lo que es peor, ni cuenta te has dado de ello”. Así le respondió el espejo al gobernante.
ANTE LA FRANQUEZA del espejo, el político muy amoscado apagó la luz del baño, salió de su palacete, abordó su lujoso automóvil haciéndose y murmurando entre dientes, se hizo la siguiente reflexión: ¡Cuánta razón tenía aquel Marqués de La Croax de tiempos del virreinato español cuando dijo: ¡“El pueblo nació para callar y obedecer.”!
ASÍ MISMO el pueblo llano y de a pie, cada año trata de hacer un balance de las cosas buenas, regulares o malas que le trajo a su familia, a nuestra ciudad, a su estado y a este sufrido país que llamamos México. Sin necesidad de entrar a profundos análisis -porque lo que se ve no se juzga- el 95% de los mexicanos coincide en que el año que fenece ha sido uno de los peores que nos han tocado vivir, si no que el peor.
COMO PEQUEÑO OBITUARIO, durante este fatídico 2010 murieron muchos hombres y mujeres que se distinguieron en servir a sus semejantes, como Carlos Monsiváis, Germán Dehesa, Roberto Cantoral, Mercedes Sosa, Mario Benedeti poeta y escritor, José el “Zacatillo” Guerrero, leyenda lagunera del beisbol, Michael Jackson, Tomás Eloy Martínez escritor y periodista argentino (“Santa Evita”).
TAMBIÉN NOS ABANDONARON, entre otros, el constructor de la Torre Latinoamericana y más de 700 obras de ingeniería, Carlos Montemayor, escritor periodista y luchador social, Mauricio Kleift el creador de los Polivoces y genial humorista, James Black creador del Propanol que a tantos millones de seres ha ayudado en sus padecimientos, Joaquín Capilla clavadista y medallista olímpico, Gabriel Vargas García el ingenioso creador de “La Familia Burrón” entre otros,
POR LO PRONTO ya se mencionaron algunas personalidades distinguidas que dejaron este mundo en 2010, así mismo ha quedado claro lo que el espejo les contestó a nuestros empleados; falta ahora que el Gobierno Federal nos aclare, no ya los homicidios, que siquiera averigüe los nombres de esos 30 mil mexicanos anónimos muertos en este año que, para la felicidad de muchos, ya está agonizando.
Pero esto quizá sería mucho pedir a nuestros empleados, vista su nula capacidad para gobernar.
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