Los insurgentes del Talibán atacaron un puesto de seguridad cercano a Afganistán, desatando un tiroteo en el que murieron cinco soldados y 21 insurgentes en una zona escenario de cruentos combates en los últimos días, dijo el viernes el ejército.
El ataque ocurrió en Orakzai, una región tribal en la que el ejército hostiga sin descanso a la insurgencia talibana que huyó de una amplia ofensiva lanzada en la vecina Waziristán del Sur.
El ejército dijo en una declaración que los enfrentamientos comenzaron cuando las fuerzas de seguridad intentaron ocupan nuevamente el puesto de seguridad capturado el jueves por la noche por los insurgentes en la zona de Kelaya. Agregó que cinco soldados y 21 guerrilleros murieron en la refriega, que concluyó cuando el ejército ocupo finalmente la instalación.
Orakzai es considerada una importante base de Hakimula Mehsud, el comandante talibano paquistaní que al parecer murió en enero a raíz de un ataque estadounidense. El Talibán niega que haya fallecido, pero no ha aportado prueba alguna de que siga vivo.
El jueves, la aviación paquistaní bombardearon varias posiciones insurgentes en otras zonas de Orakzai, matando a 61 guerrilleros refugiados en una escuela religiosa, una mezquita y un seminario, según los mandos de seguridad.
El Talibán paquistaní se ha visto presionado en su principal reducto, la región tribal de Waziristán del Sur, desde que el ejército lanzó una ofensiva en esa zona en octubre. Muchos insurgentes al parecer se dispersaron por otras áreas de la región tribal, que bordea Afganistán, en el noroeste paquistaní.
Orakzai y la vecina región tribal de Kurram han sufrido numerosos bombardeos en los últimos meses. Lo inaccesible de la región dificulta la obtención de confirmaciones independientes sobre las bajas difundidas por las autoridades y la identidad de los fallecidos.
