Seis personas murieron ayer y otras 35 resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado por una mujer contra un edificio estatal en la ciudad iraquí de Ramadi, según fuentes del Ministerio del Interior.
Las fuentes explicaron que la terrorista llevaba un cinturón de explosivos adosado al cuerpo y lo detonó en el interior de la sede de la gobernación de la provincia de Al Anbar, cuya capital es Ramadi, 100 kilómetros al Oeste de Bagdad.
El ataque ocurrió cerca de la oficina del vicegobernador de Al Anbar, Hekmat Zidan, afirmaron las fuentes, que agregaron que varios funcionarios y policías se encuentran entre las víctimas.
Las ambulancias se desplazaron al lugar para trasladar a los heridos, algunos de ellos, graves.
El edificio objetivo del ataque fue en diciembre de 2009 blanco de un doble atentado que mató a 22 personas y causó heridas a otras cincuenta.
Por otro lado, en Mosul, 400 kilómetros al Norte de Bagdad, varios policías mataron a un insurgente que llevaba un cinturón cargado con explosivos.
El objetivo del suicida, que iba disfrazado de vendedor ambulante, era atentar contra un puesto de control de la Policía.
En este incidente resultaron heridos dos policías por la explosión del cinturón a causa de los disparos efectuados por los agentes contra el agresor.