El informe citó una creciente evidencia de que los cárteles mexicanos de las drogas ya están estableciéndose al sur del país, particularmente en algunos países de América Central.
Los traficantes de drogas se están adaptando a la presión aplicada por las autoridades mexicanas y están mudando sus operaciones ilícitas a países en América Central y el Caribe, informó el lunes el Departamento de Estado en un informe anual sobre los esfuerzos globales antinarcóticos.
El informe citó una creciente evidencia de que los cárteles mexicanos de las drogas ya están estableciéndose al sur del país, particularmente en algunas naciones de América Central.
"Centroamérica y el Caribe serán más propensas a enfrentar mayores presiones de narcotraficantes desplazados a medida que México progrese en su lucha contra el narcotráfico que opera en su territorio", dice el reporte de casi 900 páginas.
Entre las naciones latinoamericanas señaladas por el Departamento de Estado que no están haciendo lo suficiente para frenar el narcotráfico figuran Bolivia y Venezuela. La dependencia estadounidense dijo que Bolivia está creando condiciones favorables para la expansión de la producción de drogas.
"Las políticas del gobierno de Bolivia en apoyo a la expansión del cultivo de la coca contribuyen al creciente exceso de cultivo de coca y a aumentos de producción de cocaína", agrega el informe.