Perspectiva. Para muchos empresarios resulta complicado el hecho de contratar a personas con antecedentes penales. EL SIGLO DE DURANGO
Cuando el empleo se convierte en un bien escaso, los antecedentes penales son un punto de referencia negativo y es ahí cuando se puede echar mano del autoempleo para apoyar a quien se quiere reintegrar al ámbito laboral.
Así lo mencionó Miguel Bermúdez Quiñones, secretario del Trabajo y Previsión Social, quien resaltó que las personas que se encuentran en esta situación son parte de un grupo vulnerable con severas dificultades para obtener empleo.
ESQUEMAS
A través de una serie de programas que implementa el Servicio Nacional de Empleo se trata de apoyar a las personas que han logrado la readaptación.
A través de la Bolsa de Trabajo se trata de reubicar a estas personas con empresas dispuestas a colaborar con su reincorporación a la vida laboral.
CAPACITACIÓN PREVIA
El funcionario estatal recordó que inclusive se trabaja con un programa de capacitación con los internos del Centro de Readaptación Social (Cereso), de forma previa a su salida.
De esta forma, cuando el reo cumple su sentencia, se le trata de ayudar a encontrar un trabajo dentro de la Bolsa de Trabajo o de los proyectos productivos para autoempleo, relacionado con lo que aprendió en su último lapso al interior del penal.
Y es que para muchos empresarios resulta complicado el hecho de contratar a personas con antecedentes penales y por obvias razones prefieren emplear a personas sin historial delictivo, por lo que al momento de que alguien que cometió un ilícito quiere comenzar de nuevo en todos los aspectos, incluyendo el laboral, se enfrenta a diversas dificultades.
Señaló que de acuerdo con lo posible se apoya a estas personas a través del Servicio Nacional de Empleo.