Esquivar los enormes baches de las calles de Chapala se vuelven toda una odisea, ya que algunos han alcanzado grandes
Aunque es considerada como uno de los sectores más grandes de Gómez Palacio, la colonia Fidel Velázquez o Chapala como se le conoce, es uno de los sitios más olvidados. Sus calles intransitables y sus muros invadidos por el graffiti así lo demuestran.
Los olvidan
Administraciones van y vienen y los problemas se acumulan así como las promesas de políticos que durante sus campañas hacen llegar a los vecinos.
"Ya es hora de que se pongan las pilas y nos tomen en cuenta, porque sólo lo hacen cuando necesitan de nuestro voto pero nada más llegan al poder y nos olvidan", dice molesta Martha Alicia Posada, vecina desde hace más de dos años.
En Chapala no importa si la calle es principal o no, el daño es el mismo. Con o sin lluvia, el pavimento se ha ido dañando ante la falta de mantenimiento. Algunos hoyancos han alcanzado grandes dimensiones, casi imposibles de librar. "Cuando uno pasa en el camión, vamos salte y salte y llegamos a nuestro destino todos adoloridos", comenta la mujer.
Contabilizar el número de vías dañadas es casi imposible, ya que ninguna de ellas se salva de los baches. "Aquí si los vecinos no hacemos algo como echarles tierrita, las autoridades no lo hacen", dice Mayela del Carmen, comerciante de este sector habitacional.
El exceso de velocidad de los camiones como los Termo Chapala y Nuevo Gómez, es otro de los factores que se suman para terminar con el asfalto.
El grafiti es otro problema que aqueja a la colonia. Casas, comercios y plazas están afectados por este "arte" callejero.