Urbana

Ni buenos ni malos... Son los mejores

Los Simpson: la serie animada más perfecta y criticada de la televisión mundial

Ni buenos ni malos... Son los mejores

Ni buenos ni malos... Son los mejores

Beatriz Mejía

¿Son Los Simpson una serie corrosiva y sarcástica, o una afirmación de las pautas y modelos sociales vigentes? ¿Qué persiguen sus creadores: arte, diseño, negocio, mero entretenimiento… o hay algo más?

Esta “pálida” historia comenzó a finales 1985, cuando James L. Brooks, productor ejecutivo estadounidense de “The Tracey Ullman Show”, atraído por “Life in Hell”, tira cómica de Matt Groening, lo invitó a colaborar en su programa.

Y aunque su intervención inicialmente sería a través de los personajes de “Life In Hell”, Groening no quiso exponer su obra a perder popularidad.

15 minutos antes de entrevistarse con Brooks, Matt le dio vida a los personajes de la serie animada más larga en la historia de la televisión, apareciendo por primera vez en pantalla el 19 de abril de 1987, con el corto titulado MG01 “Good Night”.

Sobre si era conveniente producir una serie destinada al horario estelar, la cadena Fox dudaba; ningún programa de animación desde Los Picapiedra, había logrado éxito a esa hora. El espectacular debut de Los Simpson, el 17 de diciembre de 1989, le dio respuesta a su suspicacia, incluso, muchos analistas han publicado que Fox sería ‘cosa del pasado’, si no hubiera adoptado a esta familia disfuncional.

Realmente controversial

Tampoco la sociedad sería la misma sin Homero, Marge, Lisa, Maggie, el pequeño Bart, y el resto de los habitantes de Springfield.

La serie fue causa de controversias. El personaje rebelde del momento, Bart, cuyo mal comportamiento frecuentemente quedaba sin castigo, llevó a muchos padres y conservadores a presentarlo como un mal ejemplo para los niños.

Varias escuelas públicas en Estados Unidos prohibieron utilizar material escolar con la imagen de Los Simpson y camisetas de Bart. A pesar de esto, los artículos generaron dos mil millones de dólares de ingresos en sus primeros 14 meses en el mercado.

La polémica se hizo presente, incluso, en los pasillos de la Casa Blanca. El entonces presidente de Estados Unidos, George H. W. Bush, en uno de sus discursos manifestó: “queremos lograr que la familia americana sea más como Los Walton, y menos como Los Simpson”.

Los Walton, fue una serie de la década de los 70, que narraba la historia de una familia tradicional americana. Su contenido, una demostración de nobles sentimientos, la exaltación de la familia como pilar de la sociedad, y el retrato de las buenas y sencillas personas de campo, como resultado de la conservación de los valores más tradicionales.

Los Simpson es otra historia; la serie se convirtió en un fenómenos social sin precedentes, que cambió el sentido de ver la animación.

Juan Pablo Marín, autor colombiano de “Detrás de los Simpson”, publicado en España en marzo de 2004, respondió a Urbana algunas de las preguntas que la mayoría de la gente se ha formulado en torno al contenido que propone la serie, en cada uno de sus capítulos.

Según el comunicólogo, después de hacer un análisis semiológico de la serie, descubrió que, además de contener elementos que atentan contra la buena educación, encontró una serie casi perfecta, porque está impecablemente construida.

“Cuando hice el análisis de la fisonomía de los personajes, llegué a la conclusión, a partir de semiología médica, que Los Simpson son seres humanos que han involucionado, al punto de llegar a una escala anterior en la etapa evolutiva”.

Los Simpson viven alrededor de una Planta Nuclear que les genera una serie de radiaciones y de mutaciones genéticas, afectándolos físicamente. En esta situación, es posible encontrar una crítica y un sarcasmo de cómo el individuo de hoy se ve perjudicado por la industrialización y por el consumo masivo, de forma tan elocuente, que llega alterar su apariencia.

Como lo explica el investigador, Los Simpson dejan de ser humanos para convertirse en reptiles; tienen escamas y bocas grandes con unos dientes afilados en forma de sierra.

Para el escritor, el ser más evolucionado de Springfield es Homero porque es considerado un chimpancé, y éste, se encuentra en un escalafón por encima del reptil; un aspecto que tiene que ver con las teorías psicoanalíticas de nuestro cerebro reptil, donde las personas obedecemos más a los impulsos de supervivencia y sexuales, sobre otros estímulos.

En este mismo orden, se puede ver que todos los personajes poseen los mismos rasgos y características físicas, es decir, como aquellas personas que son industrializadas, que son producidas en serie.

Tomando en cuenta todos sus aspectos, no sólo la fisonomía, sino la ciudad en donde viven: su arquitectura, su entorno urbano, la forma en que está distribuida; la psicopatología de los personajes, la forma en que actúan; y la estructura de la familia moderna, porque es clasificada una serie moderna; forman parte de un contexto con el que se identifican quienes ven la serie.

La idea de formarse una idea crítica sobre Los Simpson, no se trata de prohibir que se siga viendo, sino de asumir una postura desde el conocimiento, y como padres de familia poder advertir a sus hijos sobre su contenido.

En el cómic, desde el punto de vista del analista, incluyendo a Los Simpson, ya no se plantea una lucha entre el bien y el mal, sino una escala de valores y antivalores, y es ésta la que construye una sociedad. “El riesgo de esta serie es ese que nos identifiquemos con una gama de comportamientos que no son los más adecuados y que finalmente los adoptemos”.

Por otro lado, este tipo de series permiten un desfogue de toda la tensión social en la que, sobre todo los latinoamericanos, estamos inmersos; como lo decía Ernesto García Canclini, autor mexicano del libro “Culturas Híbridas”, que el carnaval es un espacio, una oportunidad para que el pueblo se disfrace, para que haga mofa de sus dirigentes y su sociedad.

Desde este punto de vista, Los Simpson, y otras series animadas, son esa oportunidad que tiene la sociedad de reírse de sí misma, y de hacer aquellas cosas que en sus “cinco sentidos” no harían.

También ha originado un buen número de neologismos en el lenguaje popular de todo el mundo, Mark Liberman, director del Linguistic Data Consortium, afirma: “los Simpson ha sustituido aparentemente a Shakespeare y la Biblia como nuestra principal fuente de cultura del idioma, expresiones y diversas alusiones textuales”.

“D’oh!”, famosa exclamación que Homero usa cuando es contrariado por algo, ha sido incluida en el Oxford English Dictionary (Diccionario de Inglés de Oxford), que la define como: 1. Exclamación de incredulidad ante la propia estupidez. 2. Declaración inesperada de auto-crítica. 3. Declaración verbal de humillación o angustia. 4. Respuesta involuntaria a un suceso irónico. 5. Gesto de disgusto. 6. Expresión utilizada por primera vez por el personaje televisivo, Homero Simpson.

Críticos han notado que la serie es política en su naturaleza y susceptible de un sesgo de izquierdas. Al Jean, productor y guionista de la serie, admitió en una entrevista que: “somos de inclinación liberal”

Los guionistas frecuentemente evidencian su inclinación por ideas progresistas, aunque hacen chistes con todo el espectro político. La serie presenta gobiernos y grandes empresas como entidades insensibles dispuestas a aprovecharse del trabajador y a las figuras de la autoridad con una luz oscura y desfavorable. En Los Simpson, los políticos son corruptos, los ministros eclesiásticos se muestran indiferentes hacia los feligreses, y los policías son incompetentes.

La religión es otro de los temas principales; en tiempos de crisis la familia frecuentemente vuelve sus ojos a Dios, y la serie se ha ocupado de la mayoría de las religiones mayoritarias, como el cristianismo, judaísmo o hinduismo, entre otras.

Para Juan Pablo Marín, Los Simpson no son buenos, ni malos; pero lo que sí es cierto es que no es una serie para niños, sin embargo, los adultos no están lejos de tener una postura equivocada del contenido y de este tipo de propuestas audiovisuales.

El objetivo no es hacer una prohibición; Los Simpson no son otra cosa que una crítica y el reflejo de nuestra sociedad, y cuando empezamos a entender eso, podremos disfrutar de una manera diferente la serie, y tener una posición crítica que nos permita decidir si queremos que nuestros hijos la vean, y si queremos orientarlos mejor frente a la problemática.

Pero, el éxito es indudable, su perfección, la cantidad de signos, la integración, los guiones, son elementos que harán que Los Simpson vivan por muchos años más, en los televisores de millones de personas en todo el mundo. “La estructura está ahí, y está muy bien hecha”.

Muy reconocidos

La gran paradoja es que, a pesar de las implicaciones negativas de la serie, ha ganado una gran cantidad de premios: un Peabody, 25 Emmy, 26 Annie, seis Genesis, un International Monitor, tres People’s Choice, dos British Comedy, seis Writers Guild y dos Television Critics.

La serie consiguió el preciado Emmy al “mejor programa de animación de menos de una hora”, en diez ocasiones con los episodios: “Jacques, El Rompecorazones”, “Homero Contra Lisa y El Octavo Mandamiento”, “La Boda De Lisa”, “Homero-Fobia”, “Residuos Titánicos”, “Detrás De Las Risas”, “HOMR”, “Tres Gays en un Condominio”, “La Historia Aparentemente Interminable” y, “Eterno Estupor De Una Mente Simpson”.

A la serie se le otorgó una estrella en el Paseo de la Fama en Hollywood, el 14 de enero de 2000, al iniciarse la celebración del décimo aniversario de la serie.

La revista Time, la nombró “La Mejor Serie de Televisión del Siglo XX”.

Además de la estrella, el décimo aniversario tuvo una celebración muy especial: el “Global Fanfest” (Fiesta Mundial de Fans), todo un año de festejos que culminó en octubre de 2000, con un festival temático sobre la serie, con la asistencia de Matt Groening, entre muchos otros guionistas, productores, y actores, que duró un fin de semana.

El 25 de septiembre de 2001 se lanzó simultáneamente en todo el mundo la “Colección Primera Temporada, Edición Coleccionista” en DVD, dando el “banderazo” a la venta de temporadas.

El 27 de julio de 2007 ocurrió el evento más esperado de su historia: Los Simpson, La Película llegó a los cines. Homero fue el encargado de anunciarla en un “trailer”, especialmente realizado para la ocasión, que se exhibió en cines de Estados Unidos y el Reino Unido. También pudo verse el domingo 2 de abril, durante un nuevo episodio de la serie, que acababa de ser renovada para las temporadas 18 y 19.

“Fue un enorme reto, tuvimos que llenar 120 páginas en blanco con historia y diálogos. Lo genial de Los Simpson es que puedes ir en muchas direcciones distintas, como humor bajo, humor sofisticado, comedia romántica o acción, y hacer que todas funcionen en la misma película. Gente distinta se ríe de cosas distintas y creo que la película satisface todos los gustos”, comentó el productor James L. Brooks.

La aventura fue un rotundo éxito a nivel mundial, tanto en taquilla, donde recaudó más de 525 millones de dólares, como entre la crítica, con un 90 por ciento de críticas positivas.

La Película también fue nominada a mejor película de animación de 2007 en los Globos de Oro, los BAFTA y los Annie, en los que además se llevó otras tres nominaciones.

Serie para rato

Las series se han diversificado dándonos múltiples opciones de entretenimiento, pero Los Simpson es un caso especial. Además de ser una serie pionera de un género que triunfa en la actualidad, se mantiene fuerte en las audiencias después de más de 20 años de vida.

Sobre el futuro, Matt Groening dijo para la revista Empire en febrero de 2007: “Me gustaría mucho hacer más películas y también mantener la serie en antena. Estoy listo para llegar a las 20 temporadas y más allá. Mientras la gente siga divirtiéndose, yo quiero continuar”.

Con la temporada número 20, Los Simpson batieron el récord de temporadas de una serie, que pertenecía a “Gunsmoke”.

Aunque esto no asegura el futuro de la serie, los actores firmaron un contrato que los llevará hasta la temporada 23, y plasmaron su firma, desde el contrato anterior, su participación en dos películas amarillas más.

Leer más de Urbana

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Urbana

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Ni buenos ni malos... Son los mejores

Clasificados

ID: 534195

elsiglo.mx