Capacitación Los conductores de taxis están más preocupados por llevar el sustento diario a sus familias que por capacitarse en cuestiones como el inglés, según el subdirector de Transportes del Estado.
Asegura el subdirector de Transportes del Estado de Durango, Adrián Catarino Alba, que aunque influyó la ausencia de un convenio para absorber los gastos, la razón principal por la que se suspendieron las clases de inglés para taxistas fue la falta de interés de líderes sindicales y choferes.
Y es que, a inicios del año pasado las autoridades de Transportes, en coordinación con las de Turismo Estatal y Municipal, implementaron un programa para capacitar a los conductores de los taxis para brindar un mejor servicio a visitantes de otros estados y países.
Se les enseñó sobre lugares de interés y también se contempló un curso de inglés para que pudieran orientar a turistas extranjeros. Sin embargo, algunos choferes admiten que "lo poco que aprendieron se les olvidó" porque no hubo continuidad y otros aseguran que ni siquiera se enteraron de los cursos.
Al respecto, el entrevistado reconoció que influyó la falta de dinero en la suspensión de dicha capacitación. "(El curso de inglés) se vio interrumpido porque se tenían que hacer muy buenos convenios tanto con el Municipio como con el Estado para absorber esos gastos", dijo. Pero refirió que los demás cursos contemplados en aquel momento en "Turitaxi" sí se impartieron y han dado buenos resultados. "Este año no se contempla por el hecho de que estamos aplicando lo que ya se aprendió".
Sin embargo, se pretendía dar continuidad a las clases de inglés pero ya no se retomaron. "Se les dieron algunas clases pero no intensivas, nada más de algunos conocimientos básicos y posteriormente se suspendieron por el hecho de no tener un acuerdo y poder solventar los costos (…) Era una capacitación ardua porque muchos no tienen conocimientos ni básicos del inglés y se nos complicaba", dijo.
FALTA DE INTERÉS
Sostuvo que, más que el presupuesto, influyó la falta de interés. 150 representantes de los sindicatos tenían que capacitarse y, al estar certificados, debían transmitir lo aprendido a sus compañeros.
La invitación era abierta para quienes accedieran de manera voluntaria pero no todos estuvieron dispuestos a participar. "No le pusieron mucho interés los sindicatos, porque son los que nos mandan a los muchachos para poder capacitarlos y en un momento dado, como dejaban de trabajar ciertas horas, dijeron que no se les podía apoyar en cuestión económica y los muchachos lo que quieren es trabajar y llevar un sustento a las familias.
Todas esas situaciones especiales fueron impidiendo el volver a reiniciar los cursos y en un momento dado se paralizaron", admitió. Y es que "los conductores andan al día". Negó que el programa haya fracasado pero admitió que por parte de las dependencias de Turismo se privilegiaron otras medidas como la distribución de trípticos en la Plaza de Armas.