No tenemos fuero. En el día del sacerdocio y tras bendecir los santos óleos, el arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, lanzó en la Catedral Metropolitana una advertencia a los más de mil religiosos presentes, a quienes sentenció: 'no tenemos fuero'. EL UNIVERSAL
El cardenal Norberto Rivera Carrera advirtió que no tolerará ningún acto de pederastia de sacerdotes católicos, por lo que llamó a los obispos auxiliares a realizar una revisión exhaustiva en la arquidiócesis y a las personas en general a denunciar cualquier crimen de ese tipo, tanto a las autoridades civiles como eclesiásticas.
En el día del sacerdocio y tras bendecir los santos óleos, el arzobispo primado de México lanzó en la Catedral Metropolitana una advertencia a los más de mil religiosos presentes, a quienes sentenció: "no tenemos fuero".
"Una vez más advierto a ustedes mis sacerdotes que si alguno comete abominables actos, ni un servidor ni la Arquidiócesis de México defenderá o tolerará al delincuente, antes bien promoverá que la autoridad civil actúe con todo el rigor de la ley y pague en consecuencia por sus crímenes.
"No gozamos ni debemos gozar de ningún fuero. Por supuesto que en lo eclesiástico seguiremos actuando con la severidad ordenada por la Santa Sede", dijo.
Al encabezar la renovación de las promesas sacerdotales en la arquidiócesis más grande del país, Rivera Carrera admitió que "es desconcertante" y doloroso que en este "año sacerdotal", nombrado así por el Papa Benedicto XVI, se haya atacado y desprestigiado la imagen del clérigo como nunca.
Y la causa de ello, subrayó, "no es ajena al interior de la Iglesia, son algunos sacerdotes deshonestos y criminales que con sus abominables acciones de abusos a niños inocentes han dañado irremediablemente a sus víctimas, han traicionado su ministerio sagrado, han enlodado a la Iglesia y han avergonzado a sus hermanos sacerdotes".
Por tanto, ante esta "dolorosa y vergonzosa crisis", aclaró el cardenal, más que hacer una defensa pública llamó a realizar un profundo examen de conciencia.
Acompañado por miembros del Tribunal Eclesiástico y de los siete obispos auxiliares, Rivera Carrera pidió a los sacerdotes recibir con humildad la humillación que el mundo hoy les lanza públicamente a la cara.
NORBERTO RIVERA
Arzobispo primado