Fuego. Concepción García Hernández intenta rescatar algo entre las cenizas y escombros, pero no quedó nada.
"Mamá, mamá, nos quedamos sin casa", recuerda Concepción que su hija le gritaba durante el incendio. Ahora, con las manos llenas de ceniza se limpia las lágrimas mientras intenta rescatar algo entre los escombros, pero es imposible: el fuego acabó con todo.
Sólo unos minutos fueron suficientes para que un incendio en la colonia Valle La Rosita acabara con decenas de jacales de cartón y madera, y también con las pertenencias de toda una vida de trabajo y esfuerzo.
En el fuego ardieron estufas, refrigeradores, camas, lavadoras, comida, papelería, herramientas de trabajo, dinero. Lo único que les quedó fue la ropa y los zapatos que llevaban puestos la tarde del incendio.
Y si ninguno logró rescatar sus pertenencias, tampoco a sus animales. El pequeño Mauricio le grita a sus amigos "miren, se quemó el perrito de Alex" y señala con su dedo un bulto carbonizado entre los escombros.
Algunos perros no pudieron escapar de las llamas porque estaban atados con cadenas. Los niños los escucharon ladrar de dolor pero no pudieron soltarlos para que huyeran del fuego.
María, de 12 años de edad, lamenta que no haya podido sacar su uniforme y su mochila. "Ahora no sé cómo le voy a hacer para ir a la escuela". Dice que se asustó mucho cuando escuchó que su prima le gritaba que las casas se estaban quemando, "nada más alcanzamos a correr, no pudimos sacar nada".
Don Fernando Delgado podaba algunos árboles en otra colonia cuando un vecino le avisó que su casa se estaba quemando pero cuando llegó ya era demasiado tarde: sólo quedaban cenizas.
"En el peinador tenía guardados mil 800 pesos. Tenía mucho tiempo ahorrando ese dinero y también se quemó. No pudimos hacer nada porque el fuego acabó con todo en unos minutos. Todo fue muy rápido", comenta Don Fernando.
Concepción García también tenía dos mil pesos guardados en un cajón. Con ese dinero pensaba bautizar a su hijo Ángel el próximo domingo. "Mis hijas se pusieron histéricas porque se asustaron mucho con las llamas".
En medio de la tragedia, los vecinos de la colonia Valle La Rosita se tienden la mano, pues abrieron las puertas de sus jacales para invitar a dormir a quienes perdieron todo en el incendio.
"Mi esposo quería entrar a rescatar algo pero no lo dejaron".
A Concepción se le hace un nudo en la garganta y no puede contener las lágrimas, "es muy triste quedarse sin nada de la noche a la mañana. Fueron muchos años de sacrificio y nos quedamos sin nada".
Darán apoyos
Con material de construcción, alimentos calientes, cobijas, medicinas, agua purificada y asistencia médica, las oficinas de Desarrollo Social y el DIF apoyarán a los damnificados del incendio en la colonia Valle La Rosita, sector ubicado al sur oriente de la ciudad. Fernando López Pérez, titular de Desarrollo Social, informó que se hacen además labores de limpieza y retiro de los restos de los 70 jacales quemados.
Parte de los afectados se manifestaron ayer poco antes del mediodía en la Presidencia Municipal, donde fueron atendidos por el secretario del Ayuntamiento Miguel Mery y funcionarios municipales. La entrega de materiales para que puedan reconstruir sus viviendas se dará con base en un censo que realizará Desarrollo Social.