El presidente Felipe Calderón Hinojosa presentó "la más sentida de sus disculpas" a los familiares de los 15 jóvenes masacrados en Ciudad Juárez el pasado 31 de enero, porque enmarcó este hecho en rivalidades entre padillas.
El mandatario expresó sus disculpas al iniciar la reunión "Todos somos Juárez, reconstruyamos la ciudad", en el marco de la visita que inició a esta ciudad por la mañana de este jueves.
En ese evento, Calderón hizo referencia a sus propias declaraciones hechas en Tokio, Japón, la semana pasada, donde se refirió a ese asesinato múltiple: "No sabemos qué haya ocurrido ahí, si estamos en presencia de simplemente un hecho de rivalidad entre dos grupos de jóvenes".
Poco antes, al mediodía, el presidente Calderón se reunió en Casa Amiga con algunos de los familiares de los 15 jóvenes masacrados en una fiesta.
Sin embargo, otro grupo de personas, entre ellas la señora Luz María Dávila, informó que se rehusó a asistir, junto con otras cinco madres, a la reunión de Casa Amiga, porque su exigencia es que el Presidente asistiera a Villa de Salvarcar, donde ocurrió la matanza.
Dávila exigió al presidente Calderón que se disculpara por haber calificado de pandilleros a los fallecidos.
"Claro que sí, esperamos una disculpa, porque él (Calderón) no conoce como está aquí, para qué dice que los muchachos eran pandilleros. Primero que se entere como está la situación en Juárez y que resuelva todos los problemas y después hable lo que tiene que decir", reprochó Dávila.
Durante la visita de Calderón a esta ciudad, en medio de un amplio dispositivo de seguridad, activistas y estudiantes se enfrentaron a las afueras del centro de convenciones Cibeles, donde el mandatario encabezaba una reunión con miembros de su gabinete y autoridades locales, para echar a andar el nuevo plan de seguridad para esta ciudad.
A las 13:35 horas locales, algunos estudiantes, varios de ellos con tapabocas, protestaron pero fueron retenidos por policías estatales, federales y personal militar, que resguardan la zona.
Algunos de los manifestantes y activistas se resistieron y se tiraron al piso, por lo que fueron arrastrados por los policías, lo que avivó la confrontación.
El general David Rivera Bretón, jefe de la policía local, dijo que los manifestantes obstruyeron el acceso al lugar, ubicado al norte de la ciudad y a unos 500 metros del río Bravo.
El presidente Felipe Calderón llegó este jueves a Ciudad Juárez, la urbe más violenta del país, para presentar un plan integral para hacer frente a la delincuencia organizada.
Ante el enfrentamiento, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Víctor Quintana, y Cipriana Jurado, del Centro de Investigación Popular, salieron para defender a los manifestantes, pero el estrecho cerco de seguridad les impidió acercarse.
Calderón llegó a Juárez acompañado por el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Monte, y otros integrantes de su gabinete, en medio de un amplio dispositivo de seguridad en la terminal aérea y otros puntos de la ciudad.
Fue recibido por el gobernador José Reyes Baeza y el alcalde José Reyes Ferriz, con quienes sostuvo su primera reunión privada en el hangar de la Secretaría de Defensa en el aeropuerto.
Desde muy temprano se desplegó en la ciudad un impresionante dispositivo de seguridad por parte de elementos de la Policía Federal Preventiva y del Ejército, especialmente en calles por donde pasara el convoy que movilizó al mandatario durante su visita.
También se instalaron puntos de revisión vehicular por la avenida Tecnológico en los cruces con avenida Adolfo López Mateos y bulevard Zaragoza, mientras varias unidades policíacas patrullaban la zona.
Calles completas fueron cerradas con vallas móviles y agentes antimotines resguardaron algunas zonas.
