Sin dinero. La falta de recursos para hacer obra pública, pagar puntualmente a proveedores y cumplir compromisos con organismos sociales, generaron una percepción negativa de la administración.
Fue un año de Gobierno accidentado. En estos primeros 12 meses de Eduardo Olmos Castro como alcalde de Torreón, predominaron los señalamientos por la falta de obra pública, la nómina abultada mes con mes, los problemas presupuestales y la opacidad en la rendición de cuentas.
Las críticas hacia su equipo de colaboradores, desarticulado y con los perfiles equivocados en los puestos que se les dieron sólo por cumplir los compromisos políticos, se convirtieron en la carga más pesada, que al término de este primer año dejó secuelas negativas en la percepción ciudadana hacia el Gobierno priista, que arribó tras siete años de que el PAN gobernó Torreón.
Fueron los funcionarios los responsables de diversos escándalos que en estos meses dieron armas a la oposición para enfilar sus críticas, una y otra vez.
El primer problema "saltó" desde los primeros días de enero cuando se exhibió que los recibos de cobro de agua potable del Simas traían en el reverso como domicilio fiscal, el mismo del despacho particular del tesorero Pablo Chávez Rossique en el bulevar Constitución. Otro fue la denuncia de la presencia de decenas de "aviadores" en la Nómina Municipal que cobraban en el rubro de Honorarios, el cual desde enero a la fecha se ha mantenido elevado, según las cuentas públicas.
Eduardo Olmos enfrentó también allá por el mes de marzo una crisis de seguridad pública al dar de baja prácticamente a la mayor parte de los policías municipales luego de que éstos realizaron una huelga contra el director Carlos Bibiano Villa, un general retirado que vino a implementar una dura disciplina militar, pero con un estilo muy singular.
Áreas como la Contraloría Municipal se enfocaron más a realizar una "cacería de brujas" de ex funcionarios en vez de ponerle rumbo y orden a las actividades municipales, de manera que socavaron su credibilidad.
Al día de hoy, hay funcionarios y dependencias que se desconoce qué hicieron en estos 12 meses de administración.
Faltará el gobernador
El gobernador Humberto Moreira no asistirá hoy lunes al Primer Informe de Gobierno del alcalde Eduardo Olmos Castro. Viajará a Pachuca, Hidalgo, para estar presente en la reunión del Consejo Político del PRI. En este evento, al que asisten representantes de todo el país, se definirá la forma de selección para la nueva dirigencia nacional del PRI y los tiempos de la convocatoria.
Humberto Moreira ha manifestado en reiteradas ocasiones su deseo por contender por la dirigencia máxima de su partido y sólo está a la espera de los tiempos que marcan los estatutos.
El viernes pasado durante su visita a Torreón para asistir a varios eventos, el gobernador dijo con respecto a Eduardo Olmos y su Primer Informe de Resultados que es un gran alcalde y se siente satisfecho con su labor.