Sin monitoreo. No funcionaron los cárcamos que instaló Obras Públicas en 'El Campesino' y se volvió a inundar el sector.
Al Simas se le olvidó prender los controles de los cárcamos instalados recientemente en dos sectores que tradicionalmente se inundan: El Campesino y El Tajito.
Los controles de esos equipos son manuales y a las tres de la mañana en que se registró la fuerte lluvia no hubo personal para accionarlos de manera que ambos lugares registraron severas inundaciones.
Mientras que Protección Civil empezó con los desagües desde las cuatro de la mañana, trabajadores de la empresa abastecedora llegaron hasta casi las siete de la mañana, según Margarito Castro Vega, titular de la dependencia.
Reconoce que la coordinación con esta dependencia es nula y que ha significado muchos problemas ya que no se mantiene un monitoreo oportuno y constante de la red de cárcamos de la ciudad.
"Pese a que es temporada de lluvias y sabemos los puntos rojos que se inundan, no se tiene la cultura de la prevención y mucho menos de la supervisión directa. Ya se lo he dicho varias veces a Pantaleón, pero sin respuesta", según Castro Vega.
Este tipo de situaciones le ocasiona más trabajo a Protección Civil, pérdida de tiempo y de recursos humanos y hasta combustible porque "nosotros hacemos el trabajo de otros''.
Ninguno de los cárcamos del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento tiene electroniveles que es un aditamento que se maneja por sensores y mide el nivel del agua. Cuando lo rebasa, empieza a desaguar automáticamente. Vecinos del sector de El Tajito se quejaron de que los cárcamos fueron "muy anunciados'' por autoridades municipales y no sirvieron de nada porque se volvieron a inundar.
CARCAMOS
Puso Obras Públicas en El Campesino y no sirvieron
