Arellano consiguió el ascenso con los Hidrorrayos de Necaxa y ahora desea continuar su aventura en la Primera División. (Jam Media)
México, Df.- Omar Arellano quiere continuar con el Necaxa, la institución que le dio la confianza para dirigir y que pudo guiar hacia el regreso automático a la Primera División, tras conseguir el bicampeonato de la Liga de Ascenso.
"La directiva creyó en mí, lograr ascender al equipo es muy importante para mi joven carrera en el banquillo, porque todos los días pensaba en que tenía que subir al club", se ilusiona.
Lejos de mostrar éxtasis por el ascenso, el estratega rojiblanco se muestra sereno y le da todo el crédito a sus jugadores. Les agradece que hayan hecho un "buen grupo humano".
"Este logro es totalmente de ellos, mostraron entrega, personalidad, mucho profesionalismo y ganas de conseguir el triunfo para que el equipo volviera a Primera División", enfatiza con orgullo Arellano.
El invicto de Necaxa en el Torneo Bicentenario 2010, curiosamente se terminó en el estadio de León, donde cayó por 2-1 ante los Panzas Verdes.
Sin embargo, el estratega asegura que de nada les hubiera servido terminar sin derrota y quedarse en la Liga de Ascenso.
"Al final, no importaban los números ni las marcas, si no se conseguía esto, tuvimos una gran campaña, tuvimos muchos partidos invictos y hoy perdimos como teníamos que perder en el momento preciso, pero la verdad, me siento muy contento, ha sido un año muy difícil", dijo.
Reconoció la entrega de la afición de León, por aplaudirle al final del encuentro a su equipo.