A salvo. David Cilia y Érika Ramírez, los dos periodistas de la revista Contralínea, que se encontraban desaparecidos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) anunció que "dará seguimiento" al ataque de que fue víctima una caravana humanitaria el 27 de abril en Oaxaca, México, y expresó su preocupación porque ocurran este tipo de hechos violentos.
"Vamos a comunicarnos con el Gobierno de México para manifestar nuestra preocupación y daremos seguimiento al tema", declaró el presidente del Foro Permanente de la ONU para Cuestiones Indígenas, el boliviano Carlos Mamani.
El conferencia de prensa, Mamani condenó el ataque en que murieron la activista mexicana Beatriz Alberta Cariño Trujillo y el observador finlandés Jyri Jaakkola, y en el que varias personas más resultaron heridas cuando se dirigían al poblado de San Juan Copala.
Mamani explicó que recibió una carta de Adelfo Regino Montes, abogado del pueblo Mixe, quien solicitó la intervención de la ONU para pedir al Gobierno de México investigar de manera expedita el caso y llevar ante la justicia a los responsables.
"Hemos hablado con el abogado de las comunidades afectadas y en el foro estamos muy preocupados por este asunto", indicó Mamani, durante el último día del foro indígena de la ONU, comenzado hace dos semanas.
RESCATAN A REPORTEROS Además, el delegado en Oaxaca del Instituto Mexicano del Seguro Social, Luciano Galicia, informó que los dos reporteros de la revista Contralínea, David Cilia y Érika Ramírez, sobrevivientes del ataque a la caravana, están estables y a salvo.
En entrevista, mencionó que en la madrugada de ayer fueron ingresados al Hospital Rural de Santiago Juxtlahuaca, donde normalmente se atiende a la población abierta, independientemente de sí son o no derechohabientes.
Por su parte, el gobernador responsabilizó al candidato Gabino Cue del conflicto en zona triqui.
