Ahorro. El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, habla al término de la primera jornada de la reunión de los 16 países de la zona euro en Bruselas (Bélgica). Trichet aseguró que no se opone a la participación del Fondo Monetario Internacional (FMI), al mecanismo de ayuda a Grecia acordado por los países de la eurozona, porque mantiene la responsabilidad de los Gobiernos.
- Los países de la zona del euro aprobaron ayer un plan para ayudar a Grecia a superar su crisis presupuestaria, mediante préstamos bilaterales y del Fondo Monetario Internacional (FMI) por hasta 25 mil millones de euros.
'La participación del FMI es bienvenida, no sólo por el refuerzo financiero que puede significar, sino también por su experiencia en la organización de este tipo de ayudas', dijo el primer ministro portugués José Sócrates, al anunciar el acuerdo a los periodistas.
El mecanismo fue co-patrocinado por el presidente francés Nicolás Sarkozy y la canciller alemana Angela Merkel, durante un almuerzo que mantuvieron antes del inicio de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, y fue sometido a la aprobación de los socios que comparten el euro, tras finalizar los trabajos del día.
El acuerdo estipula que la UE asumirá el liderazgo de la ayuda y las contribuciones voluntarias de los países de la zona del euro que deberán sumar entre 12 mil y 15 mil millones de euros.
España pondría a la disposición cerca de dos mil millones de euros, de acuerdo con fuentes del Gobierno que ejerce este semestre la Presidencia de turno de la UE.
PARTICIPACIÓN DEL FMI
Por su parte, el FMI deberá tener una 'participación sustancial' en el total de préstamos por hasta 10 mil millones de euros.
El objetivo del mecanismo 'no será ofrecer financiación a los tipos de interés medios de la zona del euro, sino fijar incentivos para volver a la financiación del mercado lo antes posible, mediante un precio basado en el riesgo', según el documento acordado por los 16 socios.
El texto también deja claro que el plan no será puesto en marcha ahora, ya que Grecia no ha solicitado ayuda financiera, sino que estará disponible como último recurso para salvar al país.
Cualquier desembolso de los préstamos bilaterales 'se decidirá por unanimidad entre los países miembros de la zona del euro, estará sujeto a estrictas condiciones y se basará en un análisis de la Comisión Europea (CE) y del BCE'.
Por exigencia de Alemania, el documento también recogió que el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, convoque un grupo de expertos para estudiar cómo endurecer las sanciones contra los países que incumplan los límites de déficit y deuda establecidos en las reglas de la zona del euro.
Ese grupo, que estará formado de representantes de los gobiernos nacionales, de la CE y del BCE, deberá presentar una propuesta antes de finales del año.
