EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

Palabras de poder

EL SABIO Y EL APRENDIZ

JACINTO FAYA VIESCA

Te agradezco mucho - le dijo el Aprendiz al Sabio-, que te preocupes por estarme comentando importantes enseñanzas de pensadores tan ilustres. Lo hago con mucho gusto - le respondió el Sabio-, y tengo un gran interés en contribuir a la formación de tu inteligencia y de tu espíritu.

¿Pero cuál es la razón - le dijo el Aprendiz -, de que solamente me hables de lo que tú crees que son los más grandes pensadores de la historia? La razón consiste en que a través de la historia han prevalecido lo que pudiéramos llamar nosotros "pensadores clásicos". Estos pensadores gozaron en abundancia de tres factores, como mínimo, al mismo tiempo: primero, una inteligencia sobresaliente; segundo, una originalidad en sus ideas; y tercero, un arte incomparable para transmitirnos sus pensamientos. Estos tres factores juntos, los sitúan en la cúspide de su influencia en la historia.

¿Entonces, en algún sentido - dijo el Aprendiz - han sido los fundadores de la ciencia, el arte, la filosofía y la literatura? ¡Exacto- le respondió el Sabio! Y no solamente eso, sino que además, cada uno de estos grandes pensadores han venido acumulando lo más grande de sus antecesores. Esto no significa, que el más reciente sea superior a su antecesor, sino que estos iluminados forman una fila como los más grandes humanistas de la historia. A ellos debemos reverenciarlos, como los auténticos formadores de la humanidad.

¡Mira, le explicó el Sabio! Te voy a poner el ejemplo de un pensador francés que nació en el año de 1623 y que falleció en 1662; sólo vivió 39 años. Me refiero a Blas Pascal, que fue geómetra, físico, matemático, teólogo, filósofo, inventor. Pascal escribió una obra titulada, "Pensamientos", escrito que revela la descomunal inteligencia de este escritor. A Pascal se le considera uno de los espíritus más sublimes y nobles que ha dado la humanidad. Voy a transcribirte el pensamiento número 3 del capítulo XVIII de su obra, que textualmente, dice:

"Tan alta idea tenemos del alma del hombre que no podemos sufrir un menosprecio de ella.

"La mayor bajeza del hombre es la búsqueda de la gloria, pero esto mismo es el mayor signo de su excelencia; por que, sea cualquiera, la riqueza que posea el hombre en la tierra, sea cual fuere la salud y comodidad esencial que haya, no está satisfecho si no se encuentra en la estima de los hombres. Juzga tan grande la razón del hombre que, aunque posea cualquier otra ventaja sobre la tierra, si no está colocado ventajosamente en la razón del hombre, no está contento. He aquí la mejor colocación del mundo; nada puede distraerle de tal deseo; y esta es la verdad, la causalidad más persistente en el corazón humano. Y los que más desprecian a los hombres, y los que les igualan a las bestias, muestran no obstante gran interés en ser admirados y creídos, con lo que contradicen su propia opinión. Su naturaleza, que es más fuerte que todo, les convence de la grandeza del hombre más fuertemente de lo que su razón puede convencerles de la bajeza humana."

Pascal - le dice el Sabio a su amigo -, afirma contundentemente una idea que grandes pensadores no se han atrevido a revelar, aun cuando creen ciegamente en ella: la idea consiste, en que para cada uno de nosotros, nada hay más importante que ciertos seres humanos, y nada tan doloroso, que recibir y sentir el menosprecio de esas personas. ¡Esta idea fundamental para el conocimiento del ser humano, es absolutamente cierta!, y si no, veamos:

¿Habrá algo más importante para todos los seres humanos que el amor y protección de nuestra madre y padre en los primeros meses y años de vida? ¿No es verdad, que la mayor amenaza para un niño en sus primeros años, es la de ser abandonado por sus padres? ¿Qué no podemos pasarnos toda una vida para tratar de agradar al padre que sentimos que no lo agradamos en la infancia?

¿Y los cientos de miles de suicidios que se dan cada año, de hombres y mujeres porque sufrieron el desprecio de su pareja, no revela que esa persona que la despreció era la más importante del mundo, y muchísimo más que todas las riquezas del mundo y de todos sus pobladores?

Para Pascal, la búsqueda de la "gloria" es su mayor bajeza, pero al mismo tiempo, nos dice este pensador, que es el signo de su excelencia.

Pascal se adelantó a los más grandes psicólogos modernos: el ser humano busca la gloria por el puro hecho de que lo que más estima en la vida, es el reconocimiento de los demás.

La historia - "maestra de la vida" - como lo dijo Luis Vives, nos ha revelado que no hay una búsqueda más afanosa, ni tesoro más grande, que ganarnos el respeto, la consideración, la admiración y el amor de los otros. Todo lo demás: poder político, salud, inmensas riquezas, son bienes que palidecen ante nuestro incansable esfuerzo de ser reconocidos por los demás. En el fondo de los afanes de todos los hombres ricos, subyace su idea de que gracias a sus riquezas, serán considerados y admirados por los otros.

Critilo está absolutamente de acuerdo: todo lo que hacemos, es en vista a otros. ¿Por qué razón son tan interesantes las telenovelas y películas en todo el mundo?: porque nos revelan la vida de otras personas. ¡Nada hay más importante en la vida de un ser humano, que la vida de otros seres humanos! El hombre podrá carecer de salud, riquezas, pero no habrá peor tortura, que la privación del contacto con otras personas.

¡Como si solamente hubiera una sola alma humana para todos, pero compartida por todas las personas!

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 500861

elsiglo.mx