El senador y aspirante a la dirigencia nacional del PAN, Gustavo Madero, reconoció ayer que el partido "ha perdido cercanía con la gente" para explicar sus obras en el gobierno.
Según Madero, el PAN ha tenido avances "pero también errores, como la falta de cercanía con la gente y problemas internos".
Madero, quien fue líder de la bancada del PAN en el Senado, es aspirante a la dirigencia nacional del partido, cuyo proceso interno para relevar a César Nava se llevará a cabo los primeros días de diciembre.
El senador reconoció que bajo el mando de Nava, el PAN ha tenido avances, pero también errores y "fallas entre nosotros", por lo que, dijo, todo cambio es una oportunidad para mejorar.
Junto a Madero aspiran a presidir el diputado y ex secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, la ex directora del Instituto Nacional de Migración, Cecilia Romero, y la senadora Blanca Judith Díaz.
Ramírez Acuña también ha manifestado que el PAN ha perdido cercanía con la sociedad.
Según Madero, el PAN debe "revisar qué se ha hecho mal y qué se ha hecho bien, para emprender estrategias con miras a fortalecer la cercanía con la gente, la militancia y los simpatizantes; con proyectos donde todos tengan cabida", dijo.
Madero insistió que, ante las elecciones federales de 2012, el PAN debe aceptar que le ha faltado comunicación con la población.
"Hay muchos resultados y programas que la gente no identifica ni valora, de cómo en estos diez años del PAN en el gobierno han permitido logros que no se habían tenido en los gobiernos del PRI".
Madero dijo estar confiado en que el proceso interno del PAN será democrático y "los 381 consejeros van a valorar los perfiles de la mejor propuesta".