Fuego. Policías antidisturbios huyen de las llamas de un cóctel molotov en los enfrentamientos que durante la huelga general. EFE
Cientos de manifestantes se enfrentaron ayer a la Policía antimotines en el centro de Atenas, destrozando automóviles y arrojando bombas de gasolina en una protesta multitudinaria de los sindicatos contra las medidas de austeridad del gobierno.
La Policía disparó gas lacrimógeno y granadas de iluminación mientras la violencia se propagaban frente al edificio del Parlamento y a otras partes de la capital.
Jóvenes con máscaras negras y gafas de esquí usaron mazos para sacar adoquines y lanzarlos a la Policía. Una oficina de correos cerca del parlamento se incendió brevemente, obligando a empleados y transeúntes a escapar.
La violencia estalló luego que unos 20,000 manifestantes marcharon frente al Parlamento en una huelga general por las nuevas reformas laborales en Grecia afectada por una crisis financiera.
La nueva huelga general paralizó Grecia ayer, suspendiendo vuelos, cerrando fábricas e interrumpiendo la atención en los hospitales y el servicio de transporte.
