Herencia. Se desarrolla en familias problemáticas. Invitación. 50 mujeres forman parte de Codependientes Anónimos; el próximo sábado tendrán una junta pública.
La cárcel, el manicomio o el panteón son los finales de la codependencia, trastorno emocional que sólo afecta a las mujeres, en el mundo, al 94 por ciento, según la Organización Mundial de Salud (OMS).
"Te matas, te matan o lo matas", así describió las salidas de la enfermedad incurable una de las integrantes de Codependientes Anónimos, del grupo Despertares.
¿LA CONOCE?
La codependencia es una enfermedad emocional heredada manifestada por más de cien síntomas y afecta de manera social, económica, sexual y espiritual.
Se puede desarrollar codependencia en la familia, la pareja y el trabajo.
Las mujeres se relacionan con personas que "quieren rescatar, creen que las van a ayudar", tal como un adicto, alcohólico o neurótico.
"Por lo general eligen a a alguien que esté por debajo de ellas... no están conscientes"; aunque su percepción es de un ser vulnerable, en realidad suelen ser individuos peligrosos, pero ellas los justifican.
La codependiente adopta el rol de víctima y cuando le hacen daño defiende al agresor, es atacada de forma física, económica o sexual.
Se dice que es heredada porque se aprende en la familia; si la madre es controladora o el padre alcohólico, lo transmitirán a los hijos.
Se manifiesta en las mujeres debido a "la cultura que tenemos; la mujer está acostumbrada a estar bajo el hombre", en la codependencia. Es como si ellas buscaran quien las violentara.
La mujer pudo sufrir violencia física, sexual o emocional durante la infancia, aunque hay casos donde se desarrolla dentro de una familia sana.
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Si se justifica el maltrato e incluso se cree merecedora de él...
La codependencia comienza a manifestarse a los 13 años, "durante la adolescencia, somos mujeres sin identidad, buscamos imitar a otras personas", explicó una mujer codependiente.
Las características son muy variadas, siempre se sienten víctimas, miedo, no son capaces de tomar decisiones, tienen inseguridad económica, no se expresan, llegan a padecer neurosis, depresión, ansiedad, ser adictas (alcoholismo, tabaquismo, sustancias ilegales), tener trastornos del sueño y alimenticios, suben de peso.
Caen en la hipocondriasis y la automedicación, "se sienten enfermas siempre, les duelen las rodillas, el estómago, todo".
Son mujeres con baja autoestima y buscan agradarles a los demás, por ejemplo a través de regalos, "gastan más de lo que pueden pagar". Se vuelven hurañas también, son adictas al trabajo y a emprender proyectos nuevos. Los escenarios de la enfermedad son muy variados.
En el caso de las parejas, "entra en un juego de víctima y pasa a la venganza; entre cien hombres va a elegir al que tenga algún trastorno".
La característica más generalizada es "el vacío espiritual". De no atenderse a tiempo el desenlace podría ser el asesinato o el suicidio, o bien, ser asesinadas por sus agresores.
El próximo sábado, a las 16:30 horas en el teatro Angelita Z. de González de la Vega (a espaldas del DIF Estatal), Codependientes Anónimos celebrará su quinto aniversario con una junta pública, donde se informará a fondo de la enfermedad.
