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Personas felices, hogares felices

Amor. Es a la familia a quien le corresponde proporcionar el hábitat  para ser concebido, gestado,  arropado y educado con amor.

Amor. Es a la familia a quien le corresponde proporcionar el hábitat para ser concebido, gestado, arropado y educado con amor.

Un día viendo el periódico, me topé con una nota en la primera plana, hablaba sobre el apoyo de un pequeño grupo de mujeres a el ejercito mexicano, por su labor día con día para proteger a la sociedad de tanta violencia, esto me hizo recordar el caso de Leoluca Orlando ex alcalde de Palermo, Italia; Leoluca durante su gestión se dedicó a trabajar por el bien común, luchando contra la mafia siciliana, quien prácticamente tenía el control total de la Palermo.

El primer impulso que tuvo Leoluca, fue contundente para la sociedad de Palermo, una mañana, las mujeres colgaron en la ventana, de la recamara conyugal, las sábanas blancas de su cama. ¿Por qué las sabanas?, ¿qué lugar más íntimo del hogar que la cama de los padres? Las mujeres pedían al alcalde que hiciera algo, que la mafia ya se había metido hasta al lugar más íntimo de la sociedad, la recamara, lugar de encuentro íntimo con el amor.

México tiene un problema, la violencia, la inseguridad, el narcotráfico...nos están dañando y esto se ve reflejado en el interior de nuestra sociedad: la Familia, que es la institución natural formada por un conjunto de personas donde se transmiten valores, donde se tiene la primera experiencia de convivencia y sociabilidad dentro de un ambiente libre y natural lleno de amor y espontaneidad.

Es a la familia a quien le corresponde proporcionar a cada persona el hábitat natural para ser concebido, gestado, arropado y educado con amor, además de ser la destinataria de la cultura y de los bienes del planeta. Es responsable de engendrar y educar a las nuevas mujeres y hombres que viven en sociedad.

La Vida Familiar es un espacio moral que hace posible nuestras experiencias y las moldea, es en el seno del hogar donde estás cobran sentido, donde las creencias, las costumbres y las tradiciones se tienen que mantener todos los días, se renuevan permanentemente, se establecen las coordenadas desde donde cobran sentido y valor otras dimensiones de la vida cotidiana.

La vida familiar es una matriz para la integración social, nos prepara para un mundo con los otros, un mundo donde se mantiene el existir mismo de cada persona como alteridad y reciprocidad.

Reflexiona: ¿Es nuestra casa un espacio físico o nuestro hogar es un lugar moral, donde todos tienen cabida, donde se comparte lo común y se respeta la individualidad, donde se fomenta la servicialidad, el esfuerzo corresponsable, la confianza, la reciprocidad y la generosidad?

La posibilidad de construir un proyecto de sociedad depende de la realidad de los proyectos de vida familiar, donde se aprenden los valores morales, sociales y cívicos del respeto a la diferencia, la participación y la resolución pacífica de los conflictos.

Para construir una sociedad basada en el amor, la familia debe ejercer su papel como principal formadora de mujeres y hombres de bien. Comparto contigo algunos consejos para cumplir con esta tarea formadora:

Si los papás se aman, los hijos se siente amados.

Cada hijo es diferente, date el tiempo de conocerlo.

No tengas miedo de poner reglas en tu casa, tus hijos te lo agradecerán.

Los roles de cada miembro de la familia se deben adaptar según la etapa de desarrollo.

Habla siempre con la verdad, así no tendrás nada que recordar.

El ejemplo es la mejor manera de educar a los hijos.

Los papás o tutores son la autoridad en la casa.

Siempre cumple con las promesas que haces, esto te da credibilidad.

Aprovecha cada momento para enseñar a tus hijos a través de las experiencias vividas.

Se congruente tanto en lo que dices, como en lo que haces.

Habla siempre en positivo, eso hace que la vida sea más feliz.

Respeta a tus mayores, menores, iguales y desiguales, los niños aprenden por medio de la imitación.

No critiques por criticar, hazlo por amor, buscando siempre el bienestar de la otra persona.

Evita participar en actividades que te puedan llevar a cometer un acto delictivo.

No te canses de formar a tus hijos, ellos algún día te lo agradecerán y lo pondrán en práctica.

LCF. María Teresa Moreno Arana, Instituto Superior de Estudios para la Familia Juan Pablo II.

Este viernes se lleva→ ra a cabo la presentación de Maestría "Ciencias de la famialia y Magna Conferecia" en la casa Club a las 20:00 horas, impartida por el maestro Armando Duarte Pantoja.

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