Monto. La recompensa será hasta de 5 millones de pesos que serán cubiertos en proporción a la veracidad y utilidad de la información. ARCHIVO
La Procuraduría General de la República (PGR) ofrece hasta cinco millones de pesos de recompensa a quien colabore para ubicar a personas secuestradas desde hace un año o más.
Esta estrategia para localizar a personas plagiadas en estados como Coahuila, Guerrero, Oaxaca y Michoacán incluye la oferta de dinero a cambio de información para detener a los responsables materiales e intelectuales de los hampones.
En agosto, el procurador Arturo Chávez firmó los acuerdos A/204/10 y A/206/ 10 para pedir el apoyo de la ciudadanía para obtener datos que permitan ubicar a las víctimas que continúan desaparecidas y para detener a los secuestradores.
El primero de los acuerdos publicado ofrece la recompensa a quien ayude a ubicar el paradero de José Antonio Robledo Fernández, ingeniero civil de 32 años, que fue secuestrado el 25 de enero de 2009 en el municipio de Monclova, Coahuila.
La PGR inició la investigación el 31 de enero de ese mismo año, pero hasta la fecha las pesquisas no han dado resultados, por lo que la Unidad Especializada en Investigación de Secuestros (UEIS) "consideró conveniente ofrecer una recompensa" que fue autorizada por Chávez Chávez.
Se especifica que "el monto de la recompensa será hasta de cinco millones de pesos que serán cubiertos en proporción a la veracidad y utilidad de la información".
La oferta señala la entrega de la recompensa a quien ayude a localizar a la víctima; si la información que se proporcione a la PGR permite la detención de los autores materiales del plagio se entregará un millón de pesos, pero si con los datos proporcionados se logra la aprehensión de los autores intelectuales, la suma se eleva a los dos millones y medio.
PLAGIO EN ACAPULCO El segundo acuerdo pide la colaboración para localizar a Rodrigo Carrada Gómez, profesor de educación primaria jubilado, de 73 años, que fue plagiado el 13 de junio de 2009, en el municipio de Acapulco, Guerrero.
Los secuestradores exigían por esta víctima tres millones de pesos a cambio de su liberación; "sin embargo, al no lograr obtener la cantidad solicitada optaron por ya no realizar llamadas a la familia, lo que generó que al no tener contacto, hasta la fecha se desconozca el paradero de Carrada Gómez, quien no ha sido liberado".
Los términos para la entrega de la recompensa son los mismos en todos los casos y serán los propios investigadores de la UEIS los que determinen el valor, veracidad o importancia de los datos que los informantes entreguen para ubicar a las víctimas y a los culpables.